INFORMACIÓN GENERAL
Crece el uso de home banking en el país
El servicio de “home banking” o banca electrónica sigue creciendo cada vez con mayor fuerza entre los argentinos.
En el país, el 75% de los clientes bancarizados -unos 24 millones- ya utiliza el servicio de “home banking”, un 6% más que en 2013. Además, el 62% de las personas encuestadas por la consultora D’Alessio IROL piensa que la plataforma virtual es un medio seguro para realizar transacciones. En el mercado local hay cerca de 32 millones de personas que están bancarizadas, es decir, tienen una cuenta y una tarjeta de débito.
Además, se registra un aumento en las transferencias bancarias (72% del total durante este año sobre el 66% en 2013) y de los pagos en línea (84% actuales versus 80% el año pasado).
Los datos fueron difundidos por CertiSur, compañía de suministro de soluciones para seguridad, almacenamiento y gestión de sistemas, a partir del Estudio sobre Seguridad en Internet: la visión de los usuarios (2014).
Seguridad
El estudio desarrollado para CertiSur revela que tres cuartas partes de los usuarios conectados están operando a través de “home banking” y que el crecimiento en la utilización de la herramienta se ve afectado por el temor al robo de contraseñas, deficiencia en la atención de reclamos por operaciones en línea, y complejidad en los sistemas disponibles. “Para reducir los ataques, algunas entidades bancarias establecieron niveles de seguridad adicionales al usuario y contraseña. Entre las metodologías más utilizadas están (ya desde hace varios años) las tarjetas de coordenadas que están llegando al fin de su madurez tecnológica”, explicó Norberto Marinelli, CEO de CertiSur.
Por otra parte, el ejecutivo agregó que “otras medidas acertadas son los certificados digitales que permiten la firma de transacciones logrando la mayor seguridad disponible en del mercado y los mecanismos de generación de claves de único uso (OTP) a través de un dispositivo de hardware o desde el celular”.
Fortalezas y debilidades del comercio electrónico
Entre las fortalezas de las transacciones electrónicas se encuentra el amplio uso funcional de Internet, que corta los distintos segmentos socioeconómicos. Los usuarios ya lo adaptaron a sus equipos móviles y aumenta la cultura y las operaciones que involucran dinero.
Las debilidades son varias: aún dos de cada diez usuarios declara que el sistema de compra “online” le resulta “poco claro”.
También hay una menor confianza en las operaciones realizadas en línea por mujeres y niveles medios, y una “actitud de precaución ante las operaciones que impliquen intercambio de dinero”.
Entre las amenazas se destaca el temor a dejar datos personales por el mal uso que pueden darle a los mismos; y la sensación de desprotección ante problemas u errores propios o del comercio-entidad con la que se opera.
Las oportunidades que pueden aprovechar los jugadores del mercado son las siguientes: se mantiene una amplia difusión de las redes sociales; continúa creciendo la base de potenciales consumidores por Internet, facilita entretenimiento con menor costo y los riesgos supuestos superan a lo que reconocen que sucede en la realidad.
Fuente: BAE