68 mil usuarios de Capital y Gran Buenos Aires se negaron a pagar el aumento de electricidad

Más de 68.000 usuarios de electricidad de Capital y Gran Buenos Aires se negaron a pagar el último aumento de la electricidad, que se anunció en octubre y llega hasta el 600%. La mayoría de esa gente sólo canceló la factura de acuerdo a lo que pagaba antes, pero hay una parte importante que directamente no abonó ninguna de las dos últimas boletas de la luz.

"Es una cantidad muy alta de usuarios que rechaza el pago", señaló Susana Andrada, del Centro para la Educación del Consumidor (CEC). En concreto, 15% de quienes tuvieron ajustes. "Si en otras ocasiones no fue tanta la gente que se negó a pagar un aumento de tarifas es porque tampoco nunca antes hubo antes un aumento tan irrazonable", agregó Anselmo Sella, adjunto de la Defensoría del Pueblo.

En el caso de Edenor, de los 2.250.000 clientes que tienen, el tarifazo (que se aplicó a quienes consumen más de 1.000 kwh por bimestre) alcanzó a 260.000. De este total, el 10,2% no aceptó el aumento y rechazó el pagó: 37.000 hicieron sólo un pago a cuenta y 13.000 no pagaron nada.

En el caso de Edelap, de los 295.000 clientes, tuvieron aumento 26.550. Y de esos, 1.300 pagaron sólo el consumo histórico y otros tantos no pagaron nada.

De los 2.196.000 clientes que tiene Edesur, 15.000 rechazaron el pago. De estos, un 80% optó por un pago parcial y el 20% no pagó nada.

El rechazo al pago tiene un paraguas jurídico: la Justicia hizo lugar a una medida cautelar pedida por el Defensor del Pueblo ordenando a Edenor, Edesur y Edelap que "se abstengan de efectuar cortes en el suministro de energía eléctrica motivado en la forma pago de las facturas emitidas en base a las resoluciones cuya impugnación el Defensor pretende" (ver En la Defensoría...)

En Edenor aseguran que ellos no están haciendo cortes. Edelap aseguró en un comunicado que "no se encuentra efectuando suspensiones a los suministros alcanzados por la medida cautelar". Pero en Edesur adoptaron otra política: a quienes ya dejaron impagas dos facturas, les envían una carta, y si es un hogar "acomodado", dicen, suspenden el servicio.

Es por eso que Andrada recomienda: "Quien no pueda o no quiera pagar la boleta con aumento, debe ir a la oficina de la empresa y hacer un trámite, demostrar voluntad de pago, cancelar la factura con la tarifa anterior, porque sino corre riesgo de que le corten el servicio".

El aumento de electricidad se anunció en octubre pasado y fue parte de una serie de reajustes tarifarios anunciados por el Gobierno como una manera de achicar los subsidios a las tarifas. Hubo incrementos en los boletos de colectivos y trenes, en el agua en la Provincia, fuertes incrementos en el gas en todo el país y este alza en la electricidad, que fue presentada como que afectaría sólo a los sectores de mayores consumos o ingresos. Según las empresas, alcanzó a unos 450.000 hogares en Capital y Gran Buenos Aires.

Los incrementos tarifarios generaron marchas de asociaciones de consumidores. Como la que están convocando para el 22 de abril a las 18 horas gremios y consumidores: reclamarán frente al juzgado donde se debate el amparo de la Defensoría "que se resuelva la inviabilidad de los aumentos". (CLARÍN)