Argentina sufre los primeros síntomas de la crisis mundial

Después del crack, llegó el alivio por algunas horas. Las bolsas recuperaron parcialmente las pérdidas del lunes negro. Los inversores creen, ahora, tras el nuevo reclamo desesperado de George Bush, que el rescate financiero será aprobado en el Congreso antes del fin de semana. Hoy lo tratará el Senado. Hubo alzas de 3,4% en Buenos Aires; del 4,7% en Nueva York y del 7,6% en San Pablo. El riesgo país subió 3,6%, a 957 puntos. Más allá de la especulación de los financistas, el impacto de la crisis sobre la economía real en la Argentina se sentirá en varios frentes.

SOJA. El primer impacto notorio se da por el precio del complejo oleaginoso. La tonelada cayó un 36% en dos meses, de un máximo de 602 a 384 dólares. Eso significa que, por primera vez desde marzo, la resolución 125 anunciada por Martín Lousteau, sería favorable al campo. Si estuviera vigente, la retención a la exportación de soja se ubicaría en 34,8% frente al 35% actual.

Por el derrape en la cotización, y según cálculos conservadores, el Estado se perderá de recaudar entre $4.000 y $6.000 millones el próximo año. Otras estimaciones llevan esa cifra a 10.000 millones. En este 2008, el impacto es prácticamente imperceptible porque más de media cosecha fue declarada por los exportadores a un nivel de retención del 27 por ciento.

Para compensar los menores ingresos, el Gobierno tiene decidido disminuir los subsidios. El proceso se notó en los últimos dos meses: el gasto público, que venía creciendo a un ritmo anual del 45/50%, pasó al 30 por ciento. Ya hubo incrementos tarifarios escalonados en electricidad y gas, y el próximo retoque sería en el sector del transporte público de corta distancia (colectivos, subtes y trenes). Si la caída de la recaudación es todavía mayor, por el menor consumo y una desaceleración de la inflación, entonces el ajuste fiscal llegará también a las obras públicas.

CRÉDITOS. Por la crisis y la incertidumbre, los bancos limitaron su otorgamiento. Las primeras víctimas fueron los de largo plazo, como los hipotecarios. Sólo se ofrecen a tasa de interés variable y se notó una contracción en la demanda.

Las financiaciones para el consumo, que venía expandiéndose al 40% anual, se redujeron a la mitad por la desaceleración del consumo. Esos créditos, encima, cuestan más caros que antes de la crisis. Algunas entidades financieras elevaron las tasas que pagan por los plazos fijos, lo que obligó a un ajuste adicional en lo que cobran por sus préstamos. En promedio, los plazos fijos rinden alrededor del 13% anual.

ACTIVIDAD ECONÓMICA. La desaceleración es notoria en algunos sectores, como el automotor, donde se registran menores ventas tanto de cero kilómetro como de usados, en la construcción y en la industria. De hecho, en todos estos rubros empezaron a frenarse inversiones. Estimaciones privadas dan cuenta de un crecimiento del PIB del orden del 6% anual frente a 8% de un trimestre atrás.

DÓLAR. El Banco Central planea mantener el dólar bajo control, por lo cual no subiría más allá de 3,20 o 3,25 hasta fin de año. Para ello, cuenta con 47.000 millones de reservas. El Gobierno ya tomó la decisión de postergar los pagos al Club de París, en cuotas y recién a partir de 2009 para evitar una caída adicional de las reservas en medio de la crisis.

Eso no quita que los bancos se vean forzados a subir las tasas que ofrecen a los ahorristas si en algún momento éstos se asustan y vuelven a demandar billetes verdes en forma masiva.

Para evitar sorpresas, la idea del Central es mandar el mensaje de que es más redituable ahorrar en pesos que comprar dólares.

En este contexto, el Ministerio de Economía evalúa tomar medidas para seducir el regreso de las divisas de argentinos en el extranjero, que están colocadas en bancos de Estados Unidos y Europa, y se encuentran afectados por la crisis de los créditos basura.

BRASIL. Es el gran temor de la región: la fuga de capitales golpea al sistema financiero, que floreció en los últimos años gracias a ingresos récord de fondos especulativos. El real se está devaluando a velocidad récord y los empresarios brasileños ya esperan un freno de la economía. Si Brasil crece menos, entonces las exportaciones argentinas al socio mayor se reducirán y los empresarios argentinos temen una avalancha de importaciones brasileñas.

Consejos para los consumidores

Los representantes de cuatro de las entidades que velan por los derechos de los consumidores redactaron un decálogo de consejos para prevenirlos de una potencial crisis. Susana Andrada, del Centro de Educación al Consumidor (CEC); Sandra González, de la Asociación de Defensa de Consumidores y Usuarios Argentinos (Adecua); Héctor Polino, de la Asociación Consumidores Libres; y Ana Luro, de la Liga de Acción del Consumidor (Adelco), recomendaron:

*Hacer compras esenciales.

*Pagar el mayor porcentaje de los gastos asumidos con tarjetas de crédito y evitar el mínimo.

*Reducir las extracciones bancarias.

*Evitar el endeudamiento general.

*Cuidarse de los intereses en operaciones de adquisición de inmuebles.

*Conocer los costos e intereses a la hora de comprar y financiar bienes a largo plazo.

*Sensatez al solicitar créditos bancarios, los intereses son altos.

Claves para ahorristas en crisis

Estos son algunos puntos que deben tener en cuenta los ahorristas en medio del terremoto financiero.

* No es momento para gastar sino para ahorrar. Frente a la incertidumbre, lo más aconsejable es acumular en un instrumento conservador, como un plazo fijo por ejemplo, y esperar a que aclare el panorama.

* El dólar no subirá más de 10 centavos hasta fin de año, pero tampoco va a bajar. La mayor demanda de billetes verdes, tanto por parte de empresas, bancos y público general, le puso un piso al tipo de cambio. El hecho de que el real brasileño se haya estacionado cerca de 2 por dólar también empuja a la moneda estadounidense en el mercado local.

* Los bancos argentinos están fuertes, pero es mejor hacer los plazos fijos a 30 días. Los principales bancos del sistema financiero no están afectados por la crisis internacional. Pero en un marco de incertidumbre, lo más aconsejable es pactar depósitos a corto plazo. Transcurrido ese tiempo, el cliente puede “pelear” una tasa más alta. O cambiar de inversión si le parece que debe diversificar su cartera.

* Las propiedades siguen siendo un refugio seguro de los ahorros. Es por ese motivo que continuaron en aumento en los últimos meses, a pesar de la baja del dólar.

* No es momento para sacar un crédito. Hay que esperar a que bajen las tasas de interés,que pegaron un salto con la crisis.

* La economía se desacelerará. Y podría subir el desempleo.