“Armamos un gran equipo de trabajo”

Quimprex S.A. es una PyME que se ocupa de la fabricación de tintas, barnices y diluyentes para la industria gráfica, entre las 20 empresas del rubro que hoy existen en el país es de las pocas que abarca todo su abanico de productos, Fernando Baserga (h), su actual Presidente, reconoce entre los logros más importantes de la empresa “el haber apuntado y logrado armar el equipo de trabajo que hoy somos”.

¿A qué se dedica la empresa?

Quimprex se dedica a la fabricación de tintas, barnices y diluyentes para impresión en flexografía y huecograbado.

¿Cuántos empleados ocupan?

Alrededor de cincuenta.

¿Cómo es el nivel de calificación de sus empleados y sus técnicos? ¿Qué conocimientos requieren? ¿Desde la empresa qué importancia dan a la capacitación de los mismos?

Obviamente, el nivel de calificación depende del área. Más allá de la formación académica –que en varios casos es universitaria-, la experiencia es una herramienta clave. Asimismo la capacitación es un instrumento en el que hacemos mucho hincapié; desde pequeños cursos específicos hasta carreras terciarias como Tecnicatura en Envase.

¿La empresa ha desarrollado innovaciones y tecnología propia?

Sí, desde el primer día. La investigación y desarrollo de productos surge desde nuestro laboratorio.

¿Cuáles son sus principales clientes?

Muy diversificados. Contamos con más de doscientos clientes que abarcan todas las ramas de conversión e impresión: desde bolsas, foil de aluminio y cartón corrugado a todo tipo de envase impreso de frente o laminado, marquillas y etiquetas.

¿Cómo es la competencia en su rubro? ¿Cómo están posicionados en el mercado interno?

Existen aproximadamente veinte empresas de tintas, tres de ellas multinacionales. Algunas sólo cuentan con líneas de producto para mercados puntuales, como el cartón corrugado o el polietileno. Unas pocas abarcamos todo el abanico de sustratos. No existe información fehaciente sobre participación en el mercado, pero -sin dudas- estamos muy bien posicionados.

¿Cómo nace Quimprex S.A.? ¿Es una empresa familiar? ¿Cómo ha sido su evolución a lo largo de su historia de vida?

Nace en 1990 por iniciativa de mi padre, Fernando J. Baserga, figura y referente técnico del mundo de las tintas desde finales de los 50´. Al principio completábamos el staff sólo dos personas más. Cuatro años más tarde -ya contábamos con una pequeña estructura de personal- nos mudamos a un espacio más grande, lo que nos permitió profundizar y sostener el crecimiento. En 2002 nos instalamos en la que es nuestra actual planta en el partido de San Martín. Creo que ahí empezamos a jugar en primera. Manteniendo el espíritu y los valores de siempre, de empresa familiar, iniciamos una etapa de profesionalización: incorporamos nuevos recursos humanos, estandarizamos procesos, certificamos ISO 9000, perfeccionamos desarrollos de líneas de productos. Armamos un gran equipo de trabajo. Este año lamentablemente sin mi padre, fallecido en octubre de 2010, cumplimos la mayoría de edad.

¿Cómo han sorteado la crisis de 2001?

Apostando al futuro. En pleno infierno compramos la histórica planta de Tintas Letta, empresa líder hasta su quiebra, un tiempo antes. Fueron años muy duros; especialmente los anteriores al colapso de 2001. Nacimos y dimos nuestros primeros pasos en los noventa, en medio de una coyuntura –digamos- no muy amiga de la industria ni de lo nacional. No sin vértigo, no sin angustia, -apoyados algunos en la fe en el país, otros en distintas ideas de Dios, y otros en diversas marcas de psicofármacos- miramos para adelante, tomamos algunas decisiones osadas y la cosa funcionó.

¿Qué decisión a lo largo de la historia de la empresa, usted juzga que les resultó exitosa, que fue un gran acierto?

No sé si podría hablar de una decisión en particular. Hubo muchas y muy diversas. Yo me quedo con haber apuntado y logrado armar el equipo que hoy somos.

¿Realizan ventas al exterior? ¿Cuáles son sus principales clientes?

La nuestra es una industria de servicio, lo que hace muy difícil exportar. Sólo podemos garantizar una asistencia de calidad en países cercanos, vecinos. En los últimos años nos hemos consolidado en algunos mercados de Sudamérica.

La empresa ha utilizado o utiliza servicios de la Fundación Banco Credicoop, ¿en qué consisten y qué balance puede hacer de los mismos?

Justamente hemos desarrollado junto a la Fundación un programa orientado a la búsqueda de mercados del exterior (DIVERPYMEX). La experiencia fue excelente, sumamente enriquecedora. Aunque las conclusiones puntuales rezan lo que acabo de comentar: es un rubro muy difícil para exportar.

Certificar normas de calidad, ¿qué importancia tiene la certificación en el rubro gráfico?

En el mercado gráfico, creo, tiene una importancia dispar. Para nosotros fue un paso sumamente positivo. Encabezado por nuestra gerente de aseguramiento de la calidad se desarrollaron parámetros que ayudaron a ordenarnos y a garantizar la mejora continua de los procesos. Este año comenzamos a trabajar en ISO 14000.

¿Cuáles son las perspectivas de la empresa para lo que resta de 2011? ¿Qué planes tienen para el año que comienza?

En principio, las perspectivas son muy buenas. Tenemos previsto continuar invirtiendo en equipamiento e infraestructura. Es muy importante la gestión llevada a cabo por la Cámara Gremial de Fabricantes de Tintas a la hora de mejorar determinadas cuestiones residuales que perjudican considerablemente al ramo.