CGT y empresarios pidieron un alivio a la presión tributaria
La CGT y AEA (Asociación de Empresarios Argentinos), la entidad que nuclea a los empresarios más ricos del país, celebraron una reunión virtual en la que llegaron a algunos acuerdos: en el marco de la discusión acerca del impuesto a la riqueza, afirmaron la necesidad de avanzar en una rebaja de la presión impositiva; reclamaron incrementar las exportaciones; y pidieron avanzar en un arreglo con los acreedores externos para mejorar la inserción externa.
Esta misma semana, la revista Forbes presentó el ranking de los argentinos más ricos: lideraron el dueño de Pan American Energy Group, Alejandro Bulgheroni, con una fortuna de USD5.400 millones; el creador de Mercado Libre, Marcos Galperín, con otra de USD4.500 millones; y cerró el podio Paolo Rocca, titular del Grupo Techint, con una de USD3.400 millones. Entre los tres reúnen una fortuna de casi el 4% de un PBI.
Los tres estuvieron presentes en la reunión como parte de AEA. Otros representantes del sector que estuvieron en el encuentro fueron Luis Pagani, de Arcor; Luis Pérez Companc; Héctor Magnetto, del Grupo Clarín; Sebastián Bagó, de Laboratorios Bagó; Eduardo Elsztain, de IRSA; Carlos Miguens; José Cartellone; y Enrique Cristofani, del Banco Santander.
Por el lado sindical, se sentaron Héctor Daer, secretario General de la CGT; Carlos Acuña, cotitular de la CGT; Andrés Rodríguez, secretario general adjunto de la CGT; José Luis Lingeri, titural de Obras Sanitarias; Gerardo Martínez, de la UOCRA; y Antonio Caló, líder de los metalúrgicos.
Durante la reunión virtual, empresarios y sindicalistas se mostraron de acuerdo en la necesidad de una rebaja de la presión impositiva, de avanzar en un crecimiento de las exportaciones y de alcanzar un acuerdo con los acreedores privados por la deuda externa.
Los tres reclamos en los que coincidieron ambos sectores van al centro de discusiones clave del momento: el pedido de no más presión tributaria llega en paralelo con una búsqueda impulsada desde los sectores populares de que se avance en un proyecto de impuesto a la riqueza; el de más exportaciones tiene como trasfondo un debate, entre los economistas, acerca de la pertinencia, o no, de bajar el salario en dólares para mejorar la rentabilidad; y el del acuerdo con acreedores privados se da en medio de la proclama del Gobierno por no avanzar en un programa insustentable.
Acerca del primer punto, sindicalistas y empresarios, pidieron a la vez reducir gradualmente la presión tributaria sobre el sector formal de la economía y atender la necesidad de equilibrar las cuentas fiscales. Acerca del segundo, la discusión histórica, relanzada en forma reciente por el economista Pablo Gerchunoff, apunta por un lado de los economistas a la importancia de bajar salarios en dólares para mejorar la rentabilidad e incentivar a exportar más. Del otro lado, las respuestas apuntan a la inelasticidad de las exportaciones frente a subas de la competitividad (y mayor dependencia de la demanda externa).
Ayer, el presidente Alberto Fernández sostuvo, durante una reunión virtual con empresarios internacionales del Council of the Americas: “Estamos haciendo un enorme esfuerzo con la oferta y es lo ultimo que podemos hacer. Ayudennos a alcanzar ese futuro que seguro va a ser lo mejor para los acreedores”. Aunque coincidió en la necesidad de “tener un dólar competitivo y exportar”.
En declaraciones a Futurock, Daer sostuvo: "Ayer desde la CGT nos reunimos con distintos sectores para seguir buscando un camino en común, con objetivos a mediano y largo plazo, que permitan construir un país sin deficiencias sociales. Tenemos que tener empleos de calidad, empleos formales, trabajadores bien remunerados y buenas condiciones de trabajo para tener la posibilidad de desarrollar la Argentina. Para esto hace falta invertir y tener valor agregado. Todo esto se comparte siempre discursivamente entre los distintos sectores, pero en el tránsito hay dificultades. Empezamos a transitar el camino hacia la pos pandemia".
Y agregó: "La CGT apoya totalmente la propuesta del Gobierno para el refinanciamiento de la deuda. Los argentinos estamos haciendo un esfuerzo enorme y no hay otra propuesta posible. Los bonistas tienen que comprender que el Gobierno está buscando una opción sustentable para que ellos cobren y para que, a su vez, la Argentina tenga un desarrollo sustentable. No hay otro acuerdo posible".
Por Mariano Cuparo Ortiz
Fuente: BAE Negocios