Comerciante invitó pizza gratis a todos sus clientes, para evitar control fiscal

El dueño de una pizzería burló, al menos momentáneamente, un operativo de control impositivo llamado “Punto fijo” al decidir que todos sus clientes comieran gratis, con la excusa de una invitación por “San Valentín”.

La estrategia fue ideada por el dueño de una pizzería de la localidad de Tandil. El hombre estaba desesperado por la presencia de los inspectores del municipio que se disponían a instalarse en el local para verificar la facturación y compararla con lo que declara ante la AFIP y la provincia. Entonces, decidió dar un "manotazo de ahogado” y sacó una carta de la galera de la conocida “viveza criolla".

El operativo era realizado por personal de la Secretaría de Economía local, advertida sobre la escasa facturación de la pizzería, que sin embargo refleja un gran movimiento cotidiano. Para corroborar eso, se disponían a instalarse junto a la caja registradora y verificar que cada cliente se vaya con su boleta legal.

El “punto fijo” es un mecanismo muy temido por los comerciantes porque luego hace que los encargados de recaudar hagan una estimación de lo que factura el comercio a lo largo del mes, y tras compararlo con lo que tributan, da paso a una demanda por evasión o elusión.

Sin embargo, al verificar esta presencia, trascendió que el dueño del local no solo buscó evitar a los gritos el ingreso a su local, sino que le pidió a los potenciales clientes que se disponían a entrar que fueran a otra pizzería de su propiedad, ubicada a pocas cuadras.

Pero no contento con esto, también descolgó el teléfono para evitar recibir pedidos y así tener que facturar también por ese concepto.

“¡Señores, esta noche paga la casa por San Valentín!”, fue lo que habría dicho el dueño del local, cuando, de todas maneras, la gente se sentaba en las mesas del local para comer, y de esa manera se salió con las suyas y no facturó. (MINUTOUNO)