SANTA FE | VENTA ILEGAL
Comerciantes rosarinos exigen medidas contra puestos callejeros
Los comerciantes salieron ayer a exigir más controles a la venta callejera. Es que, según datos relevados por la Asociación Empresaria de Rosario (AER), la comercialización ilegal en las calles rosarinas aumentó un 70%, especialmente en el centro de la ciudad.
Desde la Guardia Urbana Municipal aseguraron que se están efectuando operativos de control y que, diariamente, retiran entre 6 y 7 puestos de la vía pública.
El titular de la AER, Elías Soso, expresó su indignación por la “insolencia de vendedores ambulantes inhabilitados que siguen colocando sus puestos en las calles”. Dijo que provocan un perjuicio para los comerciantes que pagan impuestos y alquileres que cada vez resultan más altos.
Además consideró inadmisible que “los puestos entorpezcan el tránsito de los peatones y se coloquen a pocos pasos de los locales que venden los mismos productos”. A modo de ejemplo, relató que en una oportunidad una señora mayor tuvo que cruzarse de vereda porque no podía pasar entre los puesteros. “Al cruzar la calle la atropelló un auto y por suerte no sufrió mayores daños”, recordó el empresario.
Soso destacó también que con esta actividad “se engaña a la gente” porque se venden prendas “con una marca trucha y de dudosa procedencia”. El empresario remarcó que este asunto “debería estar en la Oficina de Defensa del Consumidor”.
Más controles. La Guardia Urbana Municipal (GUM), organismo encargado de controlar la actividad de venta callejera, en diciembre lanzó un operativo de control. “Se elaboró un registro con los nombres de los 200 puestos habilitados”, indicó el director de la repartición, Claudio Canalis.
Uno de los agentes de la GUM relató que a los puesteros se les solicita la habilitación y que “a quienes no cuentan con permiso se les saca o se les recluta la mercadería”. Además, verifican que los puestos estén ubicados en la dirección que marca el permiso.
Cada día los uniformados se encuentran con vendedores ilegales y “lo que más se secuestran son elementos como anteojos (que sólo pueden venderse en ópticas), cds y dvds”, señaló Canalis.
En el centro hay 20 agentes trabajando, sin embargo al parecer no llegan a cubrir la demanda de los empresarios.
Fiestas y paros. La realidad es que durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo la venta ilegal se disparó notablemente, no sólo por ser un período de alto consumo sino también porque coincidió con los paros municipales.
El conflicto permitió a los puesteros ofrecer los artículos más diversos frente a los locales de las peatonales Córdoba o San Martín, para nombrar sólo dos lugares.
El presidente de AER no se quedó callado. Sostuvo que Rosario se había convertido en “Afganistán” y que esa circunstancia, “lejos de ayudar a embellecer la ciudad, la empeoró”. (ON24)