Diputados aprobaron otra polémica reforma judicial

Tras un intenso debate, imperó lo previsible: el oficialismo impuso su mayoría en la Cámara de Diputados y convirtió en ley un nuevo régimen de designación de jueces subrogantes, destinado a cubrir más de 160 juzgados hoy vacantes. La oposición votó en contra, al advertir que la nueva norma le abre la puerta al kirchnerismo para designar a discreción a los magistrados interinos.

Sus críticas fueron en vano: en la votación, el oficialismo, junto con la Concertación Plural (radicales K) y otros aliados, se impuso por 97 votos, frente a 54 negativos de la oposición y tres abstenciones.

Con esta ley, el Congreso procura satisfacer el mandato de la Corte Suprema, que, en un fallo emitido hace un año, declaró inconstitucional el actual sistema de subrogancias e impuso un año a los legisladores -plazo que vence mañana- para que sancionen un nuevo régimen.

Asimismo, en aquel fallo, el máximo tribunal instó a los legisladores a que la norma respetara la Constitución nacional e incluyera al Consejo de la Magistratura, al Poder Ejecutivo y al Senado en el proceso de designación de los jueces interinos.

La oposición advirtió que la ley aprobada ayer no respeta los lineamientos trazados por la Corte Suprema. En primer lugar, porque se prorroga sin plazo el sistema de subrogancias cuestionado por la Corte hasta tanto el procedimiento que establece la ley se ponga en marcha. Pero el punto que mayor discusión insumió fue cuando la UCR, la Coalición Cívica, Pro, ARI y el Socialismo, entre otros bloques menores, alertaron sobre que el Consejo de la Magistratura estaba excluido del proceso de designación de los jueces subrogantes.

Esto constituyó un punto neurálgico del debate. De acuerdo con la flamante norma, cuando se produzca una vacancia en un juzgado ésta será cubierta por un juez de igual competencia de la misma jurisdicción. Hasta allí estaban todos de acuerdo. Pero el oficialismo incluyó una segunda alternativa en caso de que la primera no pueda cumplirse: designar al juez interino de una lista de conjueces -integrada por abogados de matrícula-, la cual será confeccionada por el Poder Ejecutivo. Esa designación, reza la ley, se hará por sorteo.

Esta alternativa es lo que provocó el generalizado rechazo de la oposición, no sólo porque el proceso de designación se limita al Senado y al Poder Ejecutivo, sino porque no incluye un plazo de duración para las nuevas subrogancias.

"Mecanismo ágil"

El oficialismo, en la voz del presidente de la Comisión de Justicia, Luis Cigogna (FPV-Buenos Aires), rechazó las críticas opositoras al enfatizar que la Constitución nacional no dispone que, en materia de subrogancias, deba participar el Consejo de la Magistratura. "No se la incluye porque, se sabe, hoy incurre en ostensibles demoras en la designación de los jueces definitivos, y lo que necesitamos es un mecanismo ágil", sostuvo.

Cigogna contó con el apoyo de la Concertación Plural, en la voz del diputado Hugo Prieto (Neuquén). "Si sobrecargamos al Consejo de la Magistratura y la incluyéramos en el proceso de designación de jueces subrogantes, estaríamos restándole tiempo a su función de designar a los jueces definitivos".

Cigogna, tras criticar duramente a la Corte por su fallo ("Se excede en las atribuciones que le confiere la Constitución y se inmiscuye en los asuntos del Congreso", dijo), negó que con esta ley el Gobierno pretendiera nombrar a jueces interinos "a dedo" pues, aclaró, éstos surgirán de un sorteo.

La diputada Marcela Rodríguez (Coalición Cívica) rebatió sus argumentos. "La ley no cuenta con la menor participación del Consejo de la Magistratura, con lo que se violenta el principio de división de poderes, otorgándole al poder político una preeminencia en la designación de los jueces", sostuvo. Y agregó: "El mero azar de un sorteo no garantiza la idoneidad de un magistrado".

Por su parte, el radical Oscar Aguad (Córdoba) siguió la misma línea. "Con esta nueva ley los tiempos van a empeorar, porque el Gobierno no va a tener ningún interés en que el Consejo eleve las ternas, porque puede hacer la lista de subrogantes", dijo.

Por su parte, el diputado Federico Pinedo (Pro) propuso que las vacantes fueran cubiertas por los integrantes de las ternas aprobadas por el Consejo de la Magistratura, iniciativa que fue recogida por varios bloques, entre ellos, el Socialismo.

"La nueva ley significa un paso atrás", enfatizó María Elena Martín (Santa Fe). (LA NACIÓN)