El Gobierno podría subir el tope para pagar Ganancias

En el Gobierno estarían analizando aplicar una nueva actualización del mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias, según trascendió de fuentes gremiales que tienen llegada directa a la Casa Rosada.

Según esas fuentes, se habrían elaborado varios borradores con distintas alternativas. Una impulsaría elevar a $ 7.000 el tope a partir del cual se paga el impuesto para los asalariados casados con hijos. Actualmente, para este mismo caso, es a partir de los 4.577 pesos.

El tema se aceleró tras el cierre de muchos convenios salariales. Con los aumentos, y al mantenerse fijo el mencionado tope salarial, una parte de la mejora no va al bolsillo del trabajador sino al Fisco. También estaría pesando el momento político: la medida beneficiaría a sectores de la clase media, contrarrestando el malestar que se suscitó a partir del conflicto con el campo, según argumentan en el Gobierno. También favorecería a la CGT que viene pidiendo la medida.

Se estima que hay unos 600.000 trabajadores en relación de dependencia y unos 30.000 jubilados y pensionados alcanzados por este impuesto.

Para evitar que cada vez más trabajadores paguen este impuesto, el Gobierno debería incrementar el mínimo no imponible y las deducciones en la misma medida que crecen los salarios. Esto representaría subir esos rubros alrededor de 25%, según estiman los sindicalistas.

Además, habría que extender la tablita de Machinea que reduce esas deducciones para los que tienen ingresos netos superiores a los 91.000 pesos anuales. O bien anularla por las fuertes distorsiones que introduce en el pago del impuesto.

La medida no tendría costo fiscal para el Gobierno. Simplemente evitaría que más trabajadores queden alcanzados por ese impuesto o que una porción mayor del sueldo quede afectada.

El año pasado, y tras las protestas de varios gremios, entre ellos los petroleros, la suba del mínimo no imponible se aprobó a fines de agosto, con retroactividad a enero. En ese caso, las empresas tuvieron que devolverle al personal lo retenido de más.

En esta oportunidad, si se aplica, también sería retroactivo al inicio del ejercicio fiscal.

Cuanto más se atrase la efectivización de la medida, por los incrementos salariales, más trabajadores tendrán que empezar a pagar Ganancias o pagarán más si ya lo venían haciendo. Esto afectaría do el poder de compra de esos trabajadores. Además sería mayor el dinero que deberían devolver las empresas.

De concretarse, también serían beneficiados los autónomos que tienen deducciones menores. (CLARIN)