El Gobierno subsidiará a las empresas de transporte con $ 45 millones mensuales

El incremento salarial del 20% que obtuvieron los choferes de colectivos de la región metropolitana le costará al Estado unos $ 45 millones mensuales en mayores subsidios que deberá desembolsar a las líneas de corta y media distancia.

Para destrabar la negociación paritaria y apurar el anuncio de un nuevo acuerdo salarial, el Gobierno se comprometió ante los empresarios del autotransporte de pasajeros a reconocer la incidencia del aumento con una ampliación de los subsidios que rigen desde hace cinco años.

De acuerdo con los cálculos que manejan las compañías del área metropolitana, el aporte del Estado para afrontar la recomposición salarial sin tocar las tarifas llegará a los $ 45 millones mensuales, una vez que se incorporen a los sueldos las sumas pactadas hasta setiembre.

Según las reglas de juego que impuso la administración kirchnerista para el transporte de pasajeros, todas las variaciones de costos que afronten las empresas de colectivos, trenes y subtes por subas de insumos y aumentos salariales deben ser compensadas con un ajuste en los boletos o con el pago de subsidios.

Durante la gestión de Néstor Kirchner, los subsidios para no tocar los boletos saltaron de:

 $ 760 millones en 2003 a casi,

 $ 2.900 millones durante 2007.

El acuerdo que anunciaron el martes en la Casa Rosada los representantes de la UTA (Unión Tranviarios Automotor) y de las cámaras metropolitanas prevé para este año un ajuste de $ 510 que se incorporará al sueldo básico mediante tres pagos de $ 170 en los meses de marzo, junio y setiembre. Según los números que las empresas le elevaron a la Secretaría de Transporte, cada una de esas subas acumulativas implicará un aumento en los subsidios de $ 15 millones mensuales para todas las líneas de la región metropolitana.

La mejora salarial conseguida por el gremio de la UTA -en línea con el 19,5% que suscribió el sindicato de camioneros de Hugo Moyano- va camino a anular el recorte transitorio que se había registrado en los subsidios del mes de febrero.

Ante los mayores ingresos que recibieron las empresas por el aumento tarifario aplicado a principios de año, el Gobierno procedió a reducir el subsidio mensual promedio de $ 10.000 por vehículo a casi $ 7.500 por cada colectivo que tienen en servicio las líneas de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.

Esa rebaja quedará ahora anulada por los mayores costos laborales que el Estado les reconocerá a las empresas de ómnibus.

A los nuevos subsidios previstos para el área metropolitana se deberán agregar los correspondientes a las líneas urbanas de las provincias y a los concesionarios de los trenes y subtes, que aún no cerraron los acuerdos salariales para 2008.

Si los aumentos pendientes sintonizan con la pauta fijada por Moyano, se necesitará, como mínimo, otra partida adicional de casi $ 30 millones mensuales para cubrir las compensaciones al transporte ferroviario y a los ómnibus del interior. (CLARÍN)