El primer cargamento de limones argentinos llegó a China

Luego de más de 20 años de negociación, arribaron a China los dos primeros cargamentos de limones argentinos y se estrenó así, el nuevo Protocolo Fitosanitario para la Exportación de Cítricos.

Tras cumplir los procesos de aduanas en Guangzhou, los embarques que llevaban un total de 436 toneladas de limones frescos salidos de Tucumán a mediados de junio, ingresaron oficialmente al país asiático y cumplieron las nuevas reglas fitosanitarias.

El Embajador argentino ante la República Popular China, Luis María Kreckler, celebró el hito: "El primer envío de limones argentinos a China tras más de 20 años de negociación, representa un hito más en la continua profundizacion de la relación bilateral comercial entre Argentina y China”.

En el noroeste de Argentina, entre 300 y 600 metros de altura sobre el nivel del mar, se cultivan los mejores limones del mundo de la variedad Eureka (limón amarillo). La producción prospera en condiciones agroecológicas únicas, propias de la provincia de Tucumán y de otras localidades de Catamarca, Salta y Jujuy, caracterizadas por suelos fértiles y clima subtropical, con niveles de lluvias que superan los 1.000 milímetros al año. Estas particulares ventajas promueven una óptima producción de fruta y una mayor cantidad de jugo.

En 2019 Argentina produjo 1,72 millones de toneladas de limones, más del 95% en la región del NOA (Catamarca, Jujuy, Salta y Tucumán). Tucumán por sí sola representa 88% del total de la producción nacional. En las provincias del NOA se cultivan 57.500 hectáreas. Asimismo, el año pasado Argentina exportó al mundo un total de 224.990 toneladas de limones frescos (241.967 toneladas anuales en promedio entre 2015-2019). Además, se destinaron 1,5 millones de toneladas al procesamiento industrial.

Kreckler agradeció a las autoridades sanitarias y al Gobierno chino por este nuevo avance en la profundización comercial con China y declaró “habilitar la venta de nuestros limones a un mercado de la magnitud y exigencia como lo es el chino, representa una magnifica oportunidad para las economías regionales y los exportadores argentinos. Debemos continuar en este camino, con la estrecha colaboración entre los productores, los exportadores y las autoridades de ambos gobiernos, para lograr flujos de comercio positivos y sustentables en el tiempo”.

Fuente: BAE Negocios