INFORMACIÓN GENERAL
El próximo martes paran Moyano, Micheli y Barrionuevo contra el Gobierno
Hugo Moyano, Pablo Micheli y Luis Barrionuevo acordaron ayer convocar a una huelga general para el próximo martes en protesta por la política oficial. Además de dos tercios de la CGT (la de Azopardo, del camionero, y la «Azul y Blanca» del gastronómico) y de la CTA opositora, el paro contará con la adhesión de otros sectores sindicales disidentes, de la Federación Agraria y de grupos piqueteros. Se trata de la primera huelga general desde 2000.
Los organizadores recién definirán hoy si la protesta irá acompañada de una movilización a la Plaza de Mayo. Es que Micheli, al término de un encuentro con Moyano, había anticipado que se haría la marcha, pero luego en la CGT se encargaron de avisar que esa opción todavía no estaba resuelta y que, de hecho, eran mayoría quienes estaban en contra.
Las dudas acerca de poner en la calle el aparato sindical pasan por la convocatoria del jueves pasado de los caceroleros: por un lado los dirigentes no quieren quedar eclipsados por esa protesta, masiva, y por otro hay varios de ellos que aconsejaron no asestarle un nuevo golpe a Cristina de Kirchner con pocos días de diferencia.
Durante la charla de ayer, Moyano llegó a sugerirle a Micheli una opción intermedia: una marcha hacia el Congreso nacional. El estatal insistió con la idea de movilizar a la Plaza de Mayo y se retiró de la reunión con la impresión de haber convencido a su colega. Poco después, una vez que Micheli ya había dado por resuelta la marcha, el camionero volvió a llamarlo para aclararle que la decisión final se tomará hoy.
Moyano reunirá desde las 15 a su Consejo Directivo y lo propio hará Barrionuevo. Entre las opciones figuran la de dejar librada a cada organización gremial para realizar la movilización que crean conveniente, o acotar la protesta sólo al paro. El gastronómico recibió ayer en su sindicato a tres delegados del camionero: su hijo mayor, Pablo Moyano, Abel Frutos (panaderos) y Juan Carlos Murgo (caucho). Los jefes de ambas centrales retomarán hoy los contactos entre ellos.
En lo que no hubo debate fue en la fijación de la fecha para el paro y en las consignas. Las banderas serán la necesidad de actualizar el mínimo no imponible de Ganancias y de inyectar fondos a las obras sociales sindicales. También incorporarán el reclamo por un plus salarial de fin de año de $ 4.000 en compensación por la falta de ajuste en el impuesto, tal como adelantó este diario el 23 de octubre pasado. Otro eje será el pago de un bono adicional para los jubilados.
Hasta la fecha del paro, los dirigentes se concentrarán en garantizar la mayor adhesión posible. El desafío será paralizar el transporte de pasajeros. Es que en la CGT de Moyano están apenas unos pocos gremios ligados a esa actividad. Rubén «Pollo» Sobrero, disidente de la Unión Ferroviaria, se ocupará de asegurar la huelga en su línea, el Sarmiento. Pero las otras, controladas por la estructura del sindicato, dependerán de acciones individuales de delegados de base. En tanto que el gremio de colectiveros, la UTA, permanece alineado con la CGT oficial, de Antonio Caló, y los organizadores admitieron que apenas habrá sectores aislados que podrían participar del paro.
El transporte aéreo no funcionará por la adhesión de los pilotos (enrolados en la CGT de Moyano) y de los técnicos aeronáuticos (del sector de Barrionuevo). En el ámbito marítimo los gremios están divididos entre las centrales del camionero y de Caló.
Además de los sectores sindicales y la Federación Agraria, la jornada de protesta contará con la participación de agrupaciones de piqueteros como la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y Barrios de Pie. Será para la CGT de Moyano, la CTA y la CCC un reencuentro después de 18 años, cuando en 1994 llevaron a cabo juntas las marchas federales contra la gestión de Carlos Menem.
Fuente: Ambito.com