ECONOMÍA

El superávit fiscal de octubre fue de $ 446 millones

El superávit primario para el mes de octubre alcanzó $ 446 millones, lo que permitió acumular en los primeros diez meses de 2011 un total de $ 12.606 millones, por encima de los $ 12.160 millones de igual período del año pasado, según anunció ayer el ministro de Economía, Amado Boudou. Sin embargo, el excedente fiscal de octubre registró una caída del 85% respecto del mismo mes de 2010, cuando equivalió a $ 3057,8 millones. En tanto, el resultado financiero, es decir los números de las cuentas públicas después del pago de la deuda, tuvieron un déficit de $ 2977 millones.

El mantenimiento del superávit primario –objetivo ampliamente perseguido por el gobierno– constituye uno de los pilares del modelo económico desde 2003, pero adquiere una importancia especial en la actualidad en tanto permiten engrosar las reservas del Banco Central en momentos en que la autoridad monetaria adquiere dólares para mantener el tipo de cambio. Además, permite aumentar los ingresos para hacer frente a los compromisos de la deuda externa del próximo año.

Los datos del superávit fueron dados a conocer por Boudou, luego de una audiencia que mantuvo con la presidenta Cristina Fernández, y el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa. Como es habitual, dentro de los ingresos corrientes se destacaron los recursos obtenidos a partir de los rubros “Ingresos Tributarios” y “Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social”, que representaron en octubre $ 23.950,6 millones y $ 11.806,6 millones respectivamente. En total, los recursos corrientes alcanzaron en este período $ 40.291,5 millones.

En tanto, los gastos corrientes sumaron $ 37.634,3, dentro de los cuales se destacaron las erogaciones correspondientes a las prestaciones en materia de Seguridad Social, en el cual el Estado invirtió $ 13.009,2 millones, y donde impactaron tanto los aumentos de fin de año como la mayor cobertura.

“El proceso de producción sigue avanzando, no hay señales de que se detenga”, explicó a Tiempo Argentino Abraham Gak, director del Plan Fénix. Sin embargo, para el especialista los datos demuestran que cada vez es más clara la necesidad de analizar a fondo una reforma tributaria. “Podríamos pasar a un Impuesto a las Ganancias personal, es decir, que las empresas sigan pagando lo que pagan, pero que los que más ganan tengan un aporte superior, no hablo del remanido asunto de gravar las ganancias de la renta financiera”, concluyó.

Fuente: Tiempo Argentino