Empresas y gremios en disputa por pedido de premio para compensar pago de Ganancias

Varias cámaras empresarias están alertas ante la avanzada de los gremios industriales y de servicios más importantes para que, a cambio de que no se haya aplicado una suba del mínimo no imponible de Ganancias, se otorgue un premio de 4.000 pesos no remunerativo a fin de año. La voz cantante en el reclamo fue del camionero ahora disidente Hugo Moyano, pero luego se sumaron los mecánicos de SMATA, los metalúrgicos de la UOM, los bancarios, los mineros, los petroleros y hasta algunos estatales. Como se ve, en el reclamo no hay diferencia entre los seguidores de la CGT leal de Antonio Caló y los rebeldes de Moyano.

En todos los casos, el argumento para el pedido se justifica a partir de la negativa del Gobierno de otorgar una suba del mínimo no imponible de Ganancias para la cuarta categoría, manteniendo el piso en los 5.782 pesos para los solteros y $ 7.998 para los casados y con dos hijos. La esperanza de las dos centrales obreras desde comienzos de año era que entre abril y junio el Gobierno de Cristina de Kirchner llevara ese mínimo a una cifra cerca a los $ 7.300 en el primer caso y a los 10.000 pesos para los segundos. Incluso desde la CGT oficialista de Caló hubo algarabía inicial al haberle comunicado, tal como adelantó este diario, a mediados de octubre el viceministro de Economía, Axel Kicillof, al titular de la CTA gubernamental, Hugo Yasky, que la decisión por la suba del mínimo era inminente. Kicillof incluso habló de cifras cercanas a los 10.000 pesos y mandó al docente a hablar con algunos funcionarios para ver cómo se aplicaría la mejora. No hubo anuncios, y finalmente los salarios de octubre se liquidaron sin el cambio del mínimo no imponible. Ahora sólo queda el pago de noviembre, el anteúltimo sueldo de 2012 y el último que se percibe este ejercicio. Obviamente los gremios ya descartan que no habrá mejoras, con lo cual ahora el reclamo es hacia los empresarios para que sean ellos los que cumplan con la liquidación vía premio por productividad, y que sea el Gobierno el que avale el pago.

El primero en hacer punta de lanza con el pedido fue Moyano. El camionero envió la semana pasada un pedido formal a la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac) para que se liquide en diciembre ese dinero a cada afiliado, como no remunerativo. Según la nota del camionero, la justificación del pedido es que «los trabajadores sufrieron la falta de actualización del piso de Ganancias», con lo que se debe «recuperar el poder adquisitivo». Los empresarios, alarmados, enviaron emisarios al Ministerio de Trabajo para abrir una rueda de negociaciones y evitar esta liquidación, en un año denominado malo por la mayoría de los privados del sector.

Inmediatamente después de los camioneros de Moyano aparecieron los bancarios de Sergio Palazzo, que reclamarán nuevamente reabrir las paritarias y que se liquide un plus de fin de año de también 4.000 pesos aproximadamente, a cuenta de los aumentos de las paritarias de 2012. En la misma línea anunciaron que se manejarán los metalúrgicos de Caló y los mecánicos de SMATA, el gremio de Ricardo Pignanelli, además de los mineros, los petroleros y los de la alimentación, que afirmaron que presentarán sus reclamos el año que viene. Entre las empresas que ya recibieron los pedidos de premios de 4.000 pesos figuran Techint, Molinos, Aluar, Acindar, Quilmes, Pepsico, Volkswagen, Ford, la mayoría de los bancos (incluyendo los públicos) y la nacionalizada YPF.

Para los empresarios la situación es seria, ya que aseguran que a diferencia de otros ejercicios, 2012 no fue un año lo suficientemente bueno (más bien fue malo para muchos) como para pensar en premios. Pero además los privados piensan que este reclamo de los 4.000 pesos de premio de diciembre se debe a un problema fiscal del Gobierno por no subir el mínimo de Ganancias, y que sería una injusticia que deban ser finalmente ellos los que tengan que cubrir en diciembre esta decisión oficial.

Fuente: Ámbito.com