Estiman récord turístico para la segunda quincena de enero

El arribo de visitantes a la Costa Atlántica crece cada día, al mismo ritmo que el consumo.

El pasado fin de semana, tanto las rutas como las terminales de micros no dieron a basto a raíz del tumultuoso recambio turístico con destino a la Costa Atlántica, y muchas compañías de micros debieron colgar el cartel de “pasajes agotados”. Sólo el sábado, se vio partir a más 6000 ómnibus de la terminal de Retiro. En zonas como Mar del Plata la ocupación está en un 85%,en Cariló llegó al 95% y en Pinamar al 90% y se espera que pronto supere el 100%, Según Ricardo Muiño, director de las filiales de la Cámara Argentina de Turismo, “recién en la segunda quincena se va a ver reflejado el verdadero impacto de gente que eligió la Costa por encima de otros destinos”.

Muiño explicó que lo que más se busca para alojarse es el apart hotel que, en comparación a una casa, es mucho más barato y permite financiamiento en cuotas.

Según Fausto Spotorno, economista de la consultora Orlando Ferreres & Asociados, el furor que se vive en la Costa se explica porque “en términos de volumen, el turismo está creciendo a una tasa cercana al 8%, similar al crecimiento que muestra la actividad económica del país.” En tanto, el economista de la Universidad de General San Martín, Enrique Dentice, explicó que para financiar las vacaciones hay un mix entre tarjeta y efectivo, pero también tarjeta de débito, porque tiene devolución del IVA y con ella se pueden comprar alimentos en los supermercados. “Lo importante es que la gente tiene dinero en el bolsillo y ha aprovechado para descansar, ese es un buen síntoma desde el punto de vista económico: confía en que lo que gaste lo va a recuperar”, señaló. Para el especialista, el auge del turismo, y en especial del consumo en la Costa Atlántica, se explica porque ha habido una recomposición de los ingresos, lo que aumentó la demanda en pesos. “Con ese excedente de dinero la gente quiere salir a divertirse, no ahorrar”, aseguró.

Ni siquiera el factor climático se advierte como un impedimento, sino, más bien, como la excusa perfecta para abocarse a consumir, ya que desde playas como Gesell o San Bernardo, los días de lluvia la gente se traslada hasta Pinamar y visitan los negocios de ropa que en esos días abren hasta tres horas antes.

A la hora del esparcimiento, los cines tienen promociones especiales con entradas a $ 19 en promedio.

(Tiempo Argentino)