Facturas que esconden un fraude

Una investigación iniciada por la AFIP para desbaratar un fraude mediante el uso de facturas apócrifas permitió descubrir la punta del iceberg de uno de los mayores escándalos de los últimos meses: el supuesto pago de coimas hecho por directivos de la empresa sueca Skanska a funcionarios del Gobierno.

Alberto Abad sostiene que ésta es una práctica generalizada en el mundo entero y que el caso mencionado fue sólo uno más de los tantos que denuncian por año.

¿Cómo se controla el fraude que se hace por medio de las facturas apócrifas, una modalidad habitual en la Argentina?

Las facturas apócrifas son una maniobra que antes de 2000 ya existía en la Argentina y en otros países... Hubo escándalos en España, México, Brasil... En eso no nos destacamos. Es una maniobra típica, donde se simula un servicio que se cobra pero que no se cumple. Ahora el que lo cobra después devuelve la plata. Lo que se logra es pagar menos IVA y menos ganancias. Eso se hace acá y en todo el mundo.

Pero ¿cómo se combate?

Bueno, existe todo un mecanismo para combatirlo. Nosotros tenemos el Plan Antievasión II, en el que pusimos la responsabilidad entre el emisor y el receptor de la factura apócrifa, establecimos una serie de controles previos por Internet para verificar la validez de la factura. Establecimos la figura de la asociación ilícita tributaria, en la que dos o más personas se juntan para facilitar que evadan otros.

Todo eso es prevención. Pero ¿cómo se lo detecta una vez que ya se cometió el delito?

Están los mecanismos de fiscalización. Tenemos toda una base de datos donde vemos operaciones en las que aparecen en varias empresas muchas facturas de una compañía que figura con dos empleados, y factura montos muy altos. O cinco o seis empresas que están ubicadas en el mismo edificio o que tienen los mismos directorios. Además, hay una base donde se pueden consultar todas las empresas que tenemos registradas como apócrifas. Toda empresa grande tiene la obligación de consultar estos datos antes de aceptar una factura.

¿Cuándo descubrieron lo que pasaba en Skanska pensaron que iba a terminar en semejante escándalo?

Nosotros hacemos varias denuncias penales de ese tipo, cuando se presupone que hay evasión impositiva. Si hacemos una fiscalía y empiezan a aparecer facturas irregulares y luego surge que hay indicios de que efectivamente se están haciendo estas facturas para evadir impuestos y que los montos están dentro de los que la ley requiere para que se constituya la evasión (para que haya evasión simple se debe evadir por año y por impuesto más de 100.000 pesos), tenemos un presupuesto de evasión. Una vez que se dan todos estos elementos, nosotros se los llevamos a los jueces en lo penal tributario, que llevan adelante toda la investigación: hacen allanamientos, piden escuchas, llaman a indagatoria, etc... y después determinan si hubo evasión o no. Se hacen más de 1300 denuncias de este tipo por año.

Pero supongo que el Gobierno no lo tomó como un caso más...

Le repito: ésta fue tomada como una denuncia más por evasión impositiva de las miles que hacemos durante todo el año.

¿Qué hay de cierto sobre que parte de la documentación de este caso se habría perdido en un incendio?

No, no. El incendio se produjo en otro lugar y se dijo que se había perdido parte de esta causa, pero de la causa en particular no se perdió nada. Además, nosotros tenemos todo en soporte digital, así que no hay forma de que se nos pierda el material. Si el juez nos pide algo, nosotros se lo hacemos llegar.

A propósito de este tema, se dice que es posible que Fulvio Madaro [ex director del Enargas, recientemente destituido a causa del caso Skanska] pase a trabajar en la Aduana. ¿Es esto así?

Fulvio Madaro trabaja en la Aduana. Hace como 20 años que es empleado en ese lugar. Después, como es de público conocimiento, pasó por el Enargas y ahora volverá a su lugar de origen. Por supuesto que se tomará todas las licencias que tiene acumuladas y que le corresponden, y en algún momento volverá a la Aduana.

Fuente: LA NACIONLINE