Gran viraje en el discurso de la CGT: ahora quieren prevenir despidos
En apenas seis días, el jefe de la CGT Hugo Moyano cambió radicalmente su libreto sobre el impacto de la crisis en el empleo: pasó de negar que hubieran despidos, incluso de acusar a “los medios masivos” de instalar esa versión, a asegurar que “hay recesión” y que “se están produciendo despidos”. Resucitó, además, el olvidado reclamo de una suma fija para los trabajadores. ¿Cómo se explica el giro discursivo del camionero? “Cambió la información disponible”, justificaron desde el moyanismo, con el objetivo de soslayar otros dos motivos: la presión de las bases y de otros dirigentes gremiales y el malestar con el Gobierno por su –entienden en la CGT– “excesiva omisión” en el fallo de la Corte a favor de la libertad sindical. A respecto, el asesor legal de la central, Héctor Recalde, amenazó con un “pedido de juicio político” al máximo tribunal.
“Algo hay que hacer. Hoy no hacemos nada, ¿o empezamos a aplaudir cuando despiden gente?”, opinó, con renovado tono desafiante, Moyano ante Radio 10, en el día de la militancia peronista.
El jefe de la CGT adelantó que “hemos pedido al Gobierno, por intermedio del Ministerio de Trabajo, que se haga todo lo necesario para evitar perder puestos de trabajo”. Por las dudas, Moyano ya cuenta con otra carta: el proyecto de ley para evitar despidos, a través de dobles y hasta triples indemnizaciones, que le encargó al diputado y laboralista de la CGT Héctor Recalde (ver entrevista). El camionero también volvió a la carga con el reclamo de unos 500 pesos para antes de fin de año, iniciativa que la propia CGT había archivado hace un par de meses, al calor de la crisis mundial. Moyano hizo equilibrio para explicar que “nosotros habíamos dicho que lo habíamos puesto al frío, pero no en el freezer. Vamos a reiterar este reclamo”.
Para Moyano, el contraste entre sus discursos –el más bien oficialista de la semana pasada contra el más reciente y combativo– responde a que “hasta no hace mucho tiempo, teníamos información de que no había despidos, pero ahora se están produciendo suspensiones, rotaciones de vacaciones, pérdidas de jornales y amenazas”. Sobre el fallo de la Corte Suprema en favor de la libertad sindical que tanto irritó a los dirigentes de la CGT, habló Recalde. El asesor legal de la CGT amenazó con “un pedido de juicio político” a los jueces de la Corte, en caso de que se repita otra “sorpresiva” sentencia.
En otro ejemplo del acuerdo ambivalente que une a Moyano con el kirchnerismo, el jefe de la CGT opinó, a la mañana, que “por ahora, la relación con el Gobierno está bien”. “Por ahora”, dijo y exigió medidas contra el desempleo. Más tarde, en el mausoleo de San Vicente, durante la celebración del día de la militancia, Moyano, uno de los vicepresidentes del PJ, compartió en paz el acto con Néstor Kirchner, presidente del partido.
En su discurso, incluso, defendió con firmeza al oficialismo: “Somos consecuentes con el Gobierno; queremos que este modelo siga adelante; la militancia y el peronismo lo van a apoyar hasta las últimas consecuencias”, afirmó en la quinta en la que, desde 2006, se encuentran los restos de Perón.
“HUGO SE PUSO LAS PILAS”. El asesor legal de la CGT, Héctor Recalde, justificó ayer que Hugo Moyano pasara de ser contemplativo a crítico del Gobierno ante “la falta de información sobre el tema” y confirmó que presentará un proyecto para evitar despidos.
–¿El Gobierno está haciendo lo necesario para evitar que haya despidos producto de la crisis? –La actitud del Ministerio de Trabajo de citar a las cámaras empresarias para evitar despidos nos parece bárbara. Pero, paralelamente, vemos que están aumentando, y eso nos preocupa.
–¿Por eso es que está trabajando en un proyecto de ley para impedir que aumenten los despidos? –Sí, Hugo Moyano me pidió el viernes pasado que prepare un anteproyecto y así lo hice. Mañana (por hoy) se lo presentaré.
–¿De qué se trata el proyecto? –Contempla, para los despidos sin causa justificada pero que hayan cumplido con el procedimiento preventivo de crisis (un trámite legal empresarial obligatorio), doble indemnización. Para los despidos sin causa y sin procedimiento preventivo, triple. Será, además, retroactivo al 30 de septiembre.
–¿Todos los despidos son especulativos? –No todos, pero muchas empresas echan gente para apretar al Gobierno, en busca de que haya una devaluación; o para conseguir exenciones impositivas. Otras, simplemente, despiden por si acaso.
–¿Y qué propone ante casos de empresas con dificultades reales? –Ahí el Estado debería ayudar mediante subsidios. Porque, además, el desempleo tiene consecuencias sociales negativas, como la inseguridad.
–¿Cómo se explica el giro discursivo de Hugo Moyano respecto a los despidos? –No hay cambio de discurso. Sólo cambió la información con la que contaba. Cavalieri (del sindicato de Comercio) y Caló (de los metalúrgicos) y le respondieron que aún no había despidos.
–¿Y era cierto? –Sí, claro. Por ejemplo, en los supermercados no hubo despidos porque contratan personal a través de agencias y, aunque bajaron las contrataciones, las agencias no despidieron.
–¿Y después qué pasó? –Otros sindicalistas le dieron su parte a Moyano: y así se enteró de despidos en sectores de la carne, los textiles, etc. Con más información, se puso las pilas.
–¿No hubo un giro, entonces, en el nivel de combatividad de Moyano? –No. Así que sáquenle el traje de monarca y pónganle de nuevo el mameluco. (Se refiere a la tapa del miércoles pasado de este diario que, bajo el título “Más papista que el Papa”, exhibía un Moyano papal.) (CRÍTICA DIGITAL)