Guillermo Moreno monitorea al sector eléctrico

El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno encabeza un gabinete energético paralelo. En los hechos, desde los cortes de luz de principios de año, se hizo cargo de la electricidad. Desconociendo al ente que monitorea al sector, Cammesa armó un comité de seguimiento que se reúne todos los martes a la tarde. Distribuidoras, transportistas y generadoras de electricidad deben rendirle cuentas al supersecretario.

Un rol que debería quedar para el secretario de Energía, Daniel Cameron, recayó en tres funcionarios cercanos al ministro de Planificación, Julio de Vido. Ellos son Roberto Baratta, su subsecretario de Control de Gestión, Luis Beuret, subsecretario de Energía Eléctrica y Moreno. “Se ordena sin papeles y se conduce sin cargos”, resumió una fuente del sector eléctrico.

A partir de la privatización de SEGBA, se creó Cammesa (Compañía Administradora del Mercado Eléctrico Mayorista) el organismo compuesto por el Estado y representantes de las empresas para seguir de cerca el mercado eléctrico y actuar de acuerdo con las necesidades del momento. Históricamente fue una entidad técnica, respetada, presidida por el secretario de Energía y a la que todas las empresas del sector obedecían orgánicamente.

A fin del año pasado, De Vido desplazó a la secretaría de Energía de Cammesa y tomó protagonismo en el organismo. Luis Beuret, gerente general de Cammesa, de licencia con goce de sueldo, hace pocos días fue nombrado presidente del ente.

El directorio de Cammesa siempre se reunió los martes a la tarde. Desde febrero, tuvo que pasar su encuentro para los miércoles porque el trío energético Moreno-Baratta-Beuret armó una “Cammesa paralela” que se reúne los martes a las 18. Estos tres funcionarios convocan a esa hora a representantes de las distribuidoras porteñas Edenor, Edesur, Transener –la transportista eléctrica más grande del país– y de los principales grupos generadores (Pampa Holding, Endesa y Sadesa). La Cammesa primigenia, además, debe remitirle a Moreno un informe semanal sobre cómo está el sistema energético.

Por último, Moreno tomó a su cargo también la Revisión Tarifaria Integral para Edenor, Edesur y Edelap, que estaba asignada al ente regulador de la electricidad (ENRE), de la que se descontaba que surgiría un ajuste para usuarios residenciales, previa audiencia pública y otros análisis técnicos.

Ahora, Moreno y las empresas están ideando un esquema de recomposición tarifaria transitoria. Los hogares de mayor poder adquisitivo serían los primeros afectados por un ajuste gradual. Las necesidades de más inversión, los aumentos de costos de las distribuidoras y los incrementos tarifarios ya reconocidos por provincias como Mendoza, Santa Fe y Córdoba a sus propias distribuidoras estatales presionan al trío a cargo de la energía a tomar una decisión al respecto. (CRITICA DIGITAL)