INDEC también contradijo al jefe de Gabinete
El superávit comercial cayó un 23% interanual en mayo y totalizó 1.005 millones de dólares, según el INDEC. Las exportaciones crecieron un 28% y llegaron a un nuevo récord de 6.203 millones, pero impulsadas exclusivamente por la escalada de precios de las commodities que exporta el país. En volumen –al contrario de lo que asegura el Gobierno–, el ente admitió que los embarques de granos y sus derivados fueron iguales o menores a los del año pasado, por efecto del lock out agropecuario.
El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, exhibió esta semana datos de la Aduana para afirmar que las medidas de fuerza del campo contra las retenciones sólo afectaron al mercado interno y no a las exportaciones. Según los números que compiló en una de sus ya clásicas presentaciones en power point (diapositivas por computadora), las ventas externas agropecuarias treparon un 28% en volumen en los primeros cinco meses del año y superaron los 27 millones de toneladas.
El INDEC lo desmintió en forma tajante en un informe difundido ayer. Allí estimó que, entre enero y mayo, las cantidades despachadas de manufacturas de origen agropecuario (MOA) fueron un 3% inferiores a las del mismo período del año pasado. Ese rubro incluye las harinas, los aceites y los pellets de soja, el producto que más se exporta desde puertos argentinos.
En mayo, la caída se sintió aun más. Los embarques fueron un 7% inferiores a los de un año atrás, aunque por efecto del auge internacional de precios la facturación trepó un 44 por ciento.
Con los productos primarios (como el trigo, el maíz y el poroto de soja) pasó algo similar. En mayo, los embarques fueron un 9% menos voluminosos que en el mismo mes de 2007. Y en los primeros cinco meses las cantidades sólo aumentaron un 2 por ciento.
El informe oficial ofrece también un desglose por producto donde reafirma el impacto del lock out que negó Fernández. “El incremento en valor de las exportaciones de aceite de soja se explicó por los mayores precios, mientras que las cantidades vendidas disminuyeron”, explica.
Al margen de la controversia con el campo, las importaciones treparon un 47% (casi el doble que las exportaciones) y llegaron a 5.198 millones de dólares. La marca de 5.000 millones fue superada por primera vez desde la salida de la convertibilidad, empujada por las compras de combustibles y energía (que crecieron un 119%), de insumos intermedios (subieron 46%) y máquinas (45%).
En junio, los industriales temen que la tendencia se acentúe por la baja del dólar, que abarató las importaciones de bienes de consumo inalcanzables dos años atrás. El tema ya disparó una nueva puja interna en la UIA, donde los sectores tradicionalmente más proteccionistas empiezan a quejarse del Gobierno y del Banco Central.
Con el resultado de mayo, la balanza comercial muestra un excedente de 4.836 millones de dólares en lo que va de 2008. La cifra es un 7% superior a la del mismo período del año pasado. Claro que con precios que en muchos casos se duplicaron (como la soja) y que en promedio treparon un 33 por ciento. Inflación de 12% en sólo seis meses
La inflación en el interior ya acumula entre el 10 y el 14% en lo que va del año, muy por encima del 4% que estimó el INDEC en el mismo lapso para la ciudad y el Gran Buenos Aires. Pero en San Luis, cuyo índice superó con creces al metropolitano todos los meses desde que comenzaron las sospechas sobre las estadísticas, los precios parecen haberse planchado en mayo. La suba que detectó el gobierno provincial fue del 0,2%, apenas un tercio del 0,6% porteño.
En tierra de los Rodríguez Saá, los alimentos y bebidas bajaron un 2% el mes pasado. Según el director de Estadística puntano, Adrián Garraza, eso fue porque los bloqueos de rutas no afectaron tanto a la provincia. Igualmente, en el año acumulan un alza del 12,1 por ciento (CRÍTICA DIGITAL)