Iveco reduce turnos y anuncia despidos
La fábrica de camiones Iveco comunicó la cancelación de 150 contratos el 31 de marzo próximo en su planta de Córdoba. El envío de telegramas contó con el aval implícito de la filial provincial del sindicato de mecánicos (SMATA), luego de dos prórrogas en los contratos negociadas a fin del año pasado. En Córdoba se encuentran en la misma situación 120 operarios de Volkswagen y otros 100 de la autopartista Gestamp, cuyo vínculo con las empresas vence a fin de marzo aunque todavía no recibieron la comunicación.
La finalización de los contratos exhibe una segunda etapa en las consecuencias locales de la crisis internacional: mientras hasta el año pasado las empresas y los sindicatos negociaban suspensiones a cambio de estabilidad general, en los últimos casos se acepta la desvinculación de los contratos a plazo con la condición de sostener las plantillas de efectivos.
En Iveco, los contratados dijeron no sentirse representados por el SMATA local y advirtieron que impulsarán medidas de fuerza en caso de quedar en firme los telegramas. Tras una movilización a la sede de la Gobernación, afirmaron haber obtenido el compromiso del secretario de Trabajo, Omar Sereno, de resolver la situación. Mientras que el gremio y la empresa alegaron que las protestas y movilizaciones realizadas por los trabajadores desafectados son impulsadas por partidos de izquierda.
La fábrica de camiones confirmó las cesantías que se harán efectivas a fin de marzo. En la compañía dijeron que las ventas cayeron en enero casi 60% en comparación con el mismo mes del año pasado. Tanto por la baja en la demanda externa (el 60% de las ventas de camiones y cabinas se destinaba al mercado latinoamericano) como en la local. De concretar la baja de contratos, Iveco sólo retendrá a 640 operarios efectivos. Entre octubre y enero otros 260 contratados aceptaron irse de la compañía tras el pago de indemnizaciones.
El secretario de prensa del sindicato local, Leonardo Almada, confirmó a Crítica de la Argentina que el gremio aceptó el cese de los contratos para mantener sin bajas el plantel de efectivos. “En enero y febrero la planta trabajó sólo una semana por mes. Evidentemente tenemos que proteger a los trabajadores permanentes”, argumentó Almada. De todos modos aclaró que más cerca del 31 de marzo se volverá a negociar con la empresa para analizar otra eventual prórroga.
El sector automotor en la provincia no goza de calma. La fábrica de Volkswagen también tiene 120 contratos que deberían vencer el 31 de marzo, al igual que otros 100 de la autopartista Gestamp.
Las multis piden menos impuestos
Las multinacionales automotrices reclamaron ayer más incentivos fiscales y aduaneros a la ministra de la Producción, Débora Giorgi, como condición para sostener su estructura ante la caída de la producción que generó la crisis mundial. Directivos de ADEFA, la cámara que las agrupa, pidieron que el Gobierno agilice la devolución de saldos impositivos acumulados por más de 1.000 millones de pesos, que habilite nuevos créditos para sus financieras y que les permita importar piezas con aranceles rebajados.
Giorgi admitió que el sector “fue el primero en sentir el impacto de la crisis financiera internacional”, pero se excusó de responderles. Las empresas vaticinan para este año un desplome de la producción que puede llegar al 30 por ciento.
Fuente: Critica Digital