La falta de gasoil complica la circulación de colectivos
Los problemas de abastecimiento de gasoil de Shell nuevamente frenan el transporte automotor de pasajeros. Al menos 30 líneas de colectivos de la zona metropolitana a partir de hoy no sacarán sus vehículos a la calle. Muchas de ellas trabajan con la mitad de coches desde el fin de semana. Se verá afectada la movilidad de alrededor de 1 millón de personas. En el interior del país, el desabastecimiento de combustibles se sigue sufriendo y en algunas provincias del Norte preparan un “bidonazo” para mañana a plantas petroleras en protesta por la falta de nafta y gasoil. En Capital, en cambio, ya no se ven tantas colas para cargar.
“Mañana no salimos”, le dijo a Crítica de la Argentina Raúl Salvi, vicepresidente de Expreso General Sarmiento, que controla las líneas 176, 448 y una local en el partido de Pilar. “Hoy tenemos la mitad de la flota adentro. Mañana no creo que podamos salir. No sabemos cuándo nos llegará el gasoil y no tenemos más reservas”, dijo un directivo de la línea 59.
El problema que no puede superarse en el conurbano tiene en la mira a Shell. La empresa recibió el sábado en el puerto de Buenos Aires un cargamento con 40.000 metros cúbicos de gasoil, alrededor de 40 millones de litros. Un retraso en la descarga de la mercadería, que se suma a la escasez por los cortes de ruta, profundizó el panorama. Una discusión no saldada con el Gobierno por la diferencia entre el precio internacional pagado por la empresa y el valor de venta del gasoil en el mercado local también frena el cargamento. Esta diferencia se cubre con un subsidio que, en el caso de Shell, lo tiene pago por sus entregas de diciembre. Según declaraciones de su presidente, Juan José Aranguren, la semana pasada, la firma tiene ocho millones de dólares “en la calle”, pendientes de pago. Consultada la petrolera, no respondió a los llamados de este diario.
Shell abastece a 15 de las 143 líneas que nacen en Capital y terminan en la provincia de Buenos Aires o viceversa.
La lista de líneas afectadas es larga. Seis empresas (las líneas 166, 216, 236, 269, 632, 633 y 634) desde ayer a la mañana no trabajan por falta de combustible. A esas se sumaron, además de todas las mencionadas, las líneas 47, 80, 239, 632, 633, 634, 244, 302, 461, 463, 464, 216, 440, 315 y 740. La suspensión de choferes es una de las medidas que están analizando en varias compañías.
La entrega de combustibles a las estaciones de servicio comenzó a normalizarse en los principales centros urbanos del país, dijeron las petroleras. Sin embargo, la escasez crónica no desaparece, especialmente en el interior. (CRÍTICA DIGITAL)