La jubilación en el top ten de los maltratos a la vejez
“Hace algunos años, los adultos mayores de nuestro país decían que el mayor maltrato que afrontaban era psicológico. Hoy dicen que el principal maltrato es el económico, por el bajo nivel de los haberes jubilatorios”, dijo Patricia Guido, psicóloga y representante nacional de la Red Internacional para la Prevención del Abuso y Maltrato en la Vejez (INPEA).
El 15 de junio de 2006 las Naciones Unidas proclamaron el Día Mundial de la Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato a la Vejez. Este año hubo un llamamiento a reflexionar un mes sobre este día, que acá se conmemora mañana.
En la Argentina más de 5 millones de adultos mayores reciben jubilaciones y pensiones promedio de 850 pesos: muy por debajo de lo necesario para una vida digna. “La percepción de una mayor incidencia del abuso financiero es un tema en la región”, aclaró Guido. Y recordó que en 2002, en la Segunda Asamblea Mundial del Envejecimiento en Madrid, los gobiernos se comprometieron a evitar situaciones de discriminación, violencia y maltrato.
Desde la Red para el Desarrollo de los Adultos Mayores, su director, Jorge Aromando, economista, coincidió. “La Argentina no tiene una política de Estado en lo económico para la tercera edad. Lo que en los 90 era una secretaría de Estado, es una dependencia de rango menor”, dijo Aromando, en referencia a la Dirección Nacional de Políticas para Adultos Mayores, que depende de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia del Ministerio de Desarrollo Social.
“La Corte Suprema falló por la movilidad de las jubilaciones, pero el Ejecutivo no cumple la decisión. Es injustificable, la mitad del presupuesto nacional está dedicada a la seguridad social”, señaló Aromando. Dio el ejemplo de Uruguay. “Desde 1986 mejoró la calidad de vida de sus mayores. Administra bien, en un sistema tributario modesto y pobre si se compara.”
¿Cómo influye el maltrato económico en la salud? “Las hormonas del estrés son muy dañinas en un momento de la vida donde las neuronas son vulnerables. Estresar a los mayores es prenderle la mecha a la pólvora”, explicó Juan Hitzig, médico gerontólogo y miembro de la Academy of Antiaging Medicine. Hitzig se mostró poco amigo de señalar un día mundial. “Me parece discriminador. Vivimos en una sociedad que maltrata a los niños, a los trabajadores, a los maestros. A los bebés que a los dos minutos de haber nacido no tienen agua potable. No sorprende que se maltrate a los viejos, si se ha maltratado a los jóvenes desde hace varias décadas”, dijo Hitzig, convencido de que el abuso no es sólo económico sino “político y social”.
Y advirtió que en el mundo entero se viene una “avalancha de viejos”. Dicho en otros términos: el famoso envejecimiento de la población. Cada dos minutos alguien en el planeta celebra 50 y cada tres alguien cumple 60. “En poco tiempo seremos tantos que deberíamos generar un nuevo paradigma en la forma de envejecer. Si a través del crecimiento personal y el autocuidado logramos extender la calidad de los años extendidos, puede que instituyamos un día para maltratar a los jóvenes”, bromeó Hitzig.
Hoy se realizarán varios actos. La titular de la Dirección de Políticas para Adultos Mayores, Mónica Roqué, y Lía Susana Diachman, de INPEA, invitaron a la comunidad a llevar una cinta de color violeta en la solapa como símbolo de adhesión. (CRÍTICADIGITAL.com)