ECONOMÍA

Letras del Tesoro en manos del Central llegarán a u$s 40.000 millones

La utilización de reservas internacionales para pagar deuda ha sido una constante desde el 2006 para el kirchnerismo. Desde aquel pago al Fondo Monetario Internacional (FMI) por u$s 9.530 millones para librarse del escrutinio del organismo, el Gobierno viene utilizando dólares que inicialmente quedan en las arcas del BCRA para avanzar en el proclamado “desendeudamiento”.

Esta política, que en realidad supone un cambio de acreedor y no una reducción de los pasivos netos, volvió a plasmarse en el Presupuesto 2013. A pesar de que los vencimientos de deuda llegan a u$s 4.000 millones (incluso en el mismo Gobierno aseveran que el cupon PBI no se pagará), se pidieron u$s 7.967 millones.

Así, desde el 2006 hasta hoy, sumando los recursos que se prevé utilizar el año próximo, el Gobierno habrá tomado un total de u$s 39.878 millones del BCRA para cancelar deuda.

Visto desde el punto del acreedor, el monto que el Tesoro le deberá al Central equivale –por ejemplo– a casi el 90% de las reservas internacionales que posee la entidad en la actualidad.

La contraparte de ceder dólares son las Letras Intransferibles que emite el Tesoro: no tienen cotización de mercado (el Central las toma al 100%), son emitidas a un plazo de 10 años, con amortización íntegra al vencimiento, devengan intereses iguales a la tasa de interés que devenguen las reservas internacionales del BCRA para el mismo período y hasta un máximo de la tasa Libor anual menos un punto porcentual, pagaderos semestralmente.

La incógnita es qué pasará cuando el Tesoro tenga que efectivamente cancelar esas letras (la primera cae en 2016 por el pago al FMI). Se descarta que habrá un roll-over por lo que las letras son en realidad un “pagadiós” que el Central tiene en su activo con el simple propósito de no dañar aún más su patrimonio.

Según el balance del BCRA actualizado al 15 de septiembre de este año, la entidad posee siete letras emitidas por el Tesoro, que hoy representan 30% de su activo.

La discusión en torno al uso de las reservas por parte del Gobierno está terminada. El ministro de Economía, Hernán Lorenzino, dijo en un reportaje a Página 12, que “desde el punto de vista financiero nadie lo duda: pagar deuda que rinde 10% u 11% con activos que rinden menos del 1%. Hoy el Banco Central acumula reservas suficientes para mantener su fortaleza en la administración del tipo de cambio a los intereses del modelo de desarrollo.

También se demostró que fue una discusión inútil”. Lo cierto es que desde el 2006 hasta el 2010, a pesar haber tomado dólares para pagar la deuda, las reservas subieron. Recién en 2011, con la fenomenal fuga de capitales, las arcas del Central bajaron en u$s 5.800 millones. Este año las reservas caen u$s 1.076 millones, a pesar del cepo al dólar.

Como recuerda la consultora Federico Muñoz & Asociados, en una primera instancia se permitió el uso de las reservas del BCRA para cancelar deuda con multilaterales; luego se extendió el permiso al pago de cualquier deuda en dólares, siempre que las reservas siguieran respaldando el 100% de la base monetaria. Pero este año se eliminó esta restricción. Y el Presupuesto 2013 levanta la última barrera restante: habilita el uso de reservas del BCRA para financiar gasto de capital.

“Lo hace subrepticiamente, al facultar al fisco a utilizar a tal fin un eventual remanente del Fondo de Desendeudamiento tras la cancelación de todos los vencimientos; remanente que seguramente existirá, pues la previsión del servicio de la deuda en 2013 está deliberadamente inflada al contemplar el pago del cupón PBI, cuando se sabe que el crecimiento económico del 2012 no superará el umbral del 3,26%”, dice la consultora.

“El gobierno insiste en utilizar al BCRA como fuente inagotable de recursos, política que conduce inexorablemente a su vaciamiento y a terminar de echar a perder al peso. Lorenzino aclaró que de ninguna manera se utilizarán las reservas para financiar gasto corriente. ¿No se da cuenta el ministro que el dinero es fungible y que al pagar gasto de capital con reservas libera recursos para financiar cualquier otro tipo de erogaciones? El relato oficial no cesa de perder consistencia”, alerta.

Fuente: El Cronista