EDUCACIÓN

Mandar un hijo a la escuela supone una inversión de hasta $ 4000 por mes

A partir de hoy los padres de alumnos que asisten a escuelas privadas deberán afinar el lápiz a la hora de realizar las cuentas mensuales del hogar. Es que el comienzo de clases supone aumentos de hasta el 25% en todo concepto con relación al ciclo lectivo 2007, cifra capaz de complicar las finanzas de más de uno.

Un repaso por algunos de los ítems centrales del presupuesto escolar permite observar un detallado escenario. Por caso, las cuotas mensuales –tema caliente antes del comienzo de las clases– pueden tocar hasta los $ 2500 sobre todo en los establecimientos educativos privados de primer nivel de la zona norte del Gran Buenos Aires.

Para presupuestos menos generosos, se pueden encontrar variantes que arrancan en los $ 200, y que pueden promediar los $ 1100 mensuales.

A esto se le debe sumar algo central: en mayo las cuotas sufrirán un nuevo reacomodamiento.

A pesar de este nivel de gastos, en los últimos cinco años cerca de 800.000 alumnos se pasaron a escuelas privadas, según datos del Ministerio de Educación.

Las razones no saben de temas monetarios, sino que se basan en la búsqueda de mayores días de estudio y mejor calidad en la educación que las que puede ofrecer la educación pública.

Sin embargo, pertenecer tiene sus costos. El transporte escolar también tiene peso en el presupuesto. Aunque depende mucho de qué zona recorra el vehículo, la franja de costos puede tocar un techo de $ 500, aunque en los barrios de clase media se verán valores de hasta los $ 250.

El rubro mochilas es una pequeña complicación. Hay modelos de todos los tamaños y variedades, aunque hay que empezar a hablar en un costo de $ 30, sólo para el caso de un pequeño que da sus primeros pasos en el jardín de infantes.

En el caso de que se trate de un estudiante de primaria, muchas veces tentado en los productos que tienen las imágenes de sus personajes favoritos, habrá que pensar en una inversión que difícilmente baje de los $ 130, e incluso alcance techos de $ 200.

En el caso de que se opte por la doble escolaridad, desde ya, se suma un nuevo costo. El niño se deberá quedar a comer en el comedor de la escuela, pensando en la opción más práctica, lo que equivale a un gasto mensual que orillará los $ 300.

Y en el caso de que se trate de un niño que recién comience el ciclo primario o secundario –por lo que se supone que no cuenta con él–, será necesario comprar el uniforme adecuado para cada colegio. El equipamiento completo no cae de los $ 250.

El último aspecto a atender es el de los útiles y libros. Nuevamente trabajando sobre la situación supuesta de que el alumno no cuenta con ninguno de los elementos, habrá que pensar en un gasto que difícilmente esté por debajo de los $ 280 cada 30 días. (EL CRONISTA)