Medidas oficiales con el objetivo de abaratar el crédito
El Banco Central lanzó anoche dos nuevas medidas para aplacar la disparada de las tasas de interés del último mes. Por un lado amplió en 7 mil millones de pesos su línea de créditos de corto plazo (pases activos) para fortalecer la liquidez de los bancos. Por otro, habilitó a las entidades a contabilizar todo el efectivo en sucursales –y hasta en camiones de caudales– como parte de sus encajes, la porción de los depósitos que deben mantener inmovilizada y sin prestar. En conjunto, ambas disposiciones liberan 10.500 millones de pesos para la oferta de pesos al público, que se vio recortada bruscamente por las ventas de dólares del propio Banco Central en las últimas semanas.
Cada vez que vendió divisas, el organismo que conduce Martín Redrado absorbió los pesos que le entregaron a cambio. Así alimentó el alza de las tasas de interés, con las que a su vez buscó tentar a los ahorristas para que no retiren su dinero del sistema.
Las tasas se dispararon en el último mes por la salida de plazos fijos, cuyos titulares los retiraron en masa para comprar dólares. Para retener los fondos, los bancos llegaron a ofrecer el 26% anual de interés por colocaciones a 30 días de más de un millón de pesos. Ahora bajaron a algo más del 22%, pero a fines de septiembre pagaban la mitad. En el mismo lapso también duplicaron lo que cobran por los préstamos. (CRÍTICA DIGITAL)