Otro récord para la soja
La secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación (SAGPyA) estimó este miércoles la superficie sembrada con soja en la presente campaña, concluida ya en 99%, en 17 millones de hectáreas tras las siembras tardías en el noreste (Chaco, Santiago del Estero y Formosa).
El área destinada al principal cultivo del país vuelve a superar su récord histórico, ya que se ubica 2,4% por encima del ciclo anterior y supera en 5,3% a la campaña 2006-2007.
En su informe de estimaciones mensuales, la SAGPyA destacó que las lluvias recientes en el centro y sur de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos mejoraron la humedad edáfica y generaron "buenas expectativas de rindes futuros".
"Será importante el aporte hídrico que se produzca a corto plazo, cuando comienzan a definirse las productividades, sobre todo en gran parte de la zona oeste, sudoeste y centro sur de Buenos Aires", indicó el informe.
Esas áreas, precisó, "aún no han recibido recarga hídrica que permita reponer los altos déficits de humedad originados por la alta demanda ambiental".
En el caso del trigo, la escasez de lluvias, particularmente en el período óptimo de implantación, no sólo limitó la siembra, sino que además "disminuyeron el potencial productivo y las expectativas de rendimientos aceptables".
Este comportamiento climático generó una cobertura de área implantada de 4.670.000 hectáreas.
Al finalizar la campaña nacional, la variable de rendimiento fue la que más contribuyó para la disminución de la producción estimada, indicó la Secretaría.
El área perdida fue superior a las 460 mil hectáreas y la superficie cosechada ascendió a 4.210.000 (con una caída de 29,2% frente a la campaña previa), ya que a la sequía y las altas temperaturas se agregó algún daño por heladas y la baja dosis de fertilizantes agregados.
"Las pobres productividades obtenidas en la zona sudeste bonaerense impidieron tener expectativas importantes en relación a la producción", agregó la SAGPyA.
Dada la importancia relativa de la zona en cuanto al total nacional, la producción para esta campaña se ubica alrededor de 8,3 millones de toneladas (49,1% menos que en el ciclo anterior).
Para el maíz, en tanto, se registra una intención en el área a sembrarse (grano más forraje) de 3.360.000 hectáreas, con reducciones en todas las zonas productoras.
Pero 960 mil hectáreas que no se cosecharán (28% del total), con lo que el área cosechable para la obtención de granos rondará los 2,4 millones de hectáreas.
Las consideraciones anteriores permiten estimar una posible producción final que se ubicará entre 12,5 y 13,8 millones de toneladas, equivalente a una baja superior al 40 por ciento con relación a 2007-2008, en caso de darse la peor hipótesis.
"La falta de humedad en el período crítico de floración soportada en la zona núcleo, en el oeste bonaerense, centro-norte de Santa Fe y en otras regiones genera dificultosa la obtención de rindes satisfactorios", señaló el informe.
Asimismo, agregó, debido a las adversas condiciones climáticas, se ha incrementado el área que no será cosechada para la obtención de grano, ya que debido al mal estado de los cultivos y las bajas expectativas de producción, muchos han destinado a la alimentación animal (pastoreos y/o picado para forraje) porciones importantes de superficie.
Para el girasol, la superficie a implantar se reducirá más de 20% en relación a la campaña anterior: la sequía llevó el área perdida a más de 200 mil hectáreas y la superficie final cosechable será de 1.880.000.
Esta reducción de área refleja las expectativas de siembra menores en todas las provincias, a excepción de La Pampa que incrementó su cobertura.
Teniendo en cuenta los factores climáticos apuntados, la producción final estimada para este año se ubicaría en 2,4 millones de toneladas (48,4% menos que en el ciclo anterior).
La cosecha ya comenzó (21% del área levantada) en Chaco, Santiago del Estero, Santa Fe, La Pampa y Entre Ríos, con rendimientos que rondan los mil kilos por hectárea.(TELAM)