Por el plan oficial sólo se vendieron mil autos
A casi cuatro meses de su lanzamiento, el plan oficial de incentivo a la venta de autos cero kilómetro entregó “menos de mil vehículos” a sus beneficiarios, según informó ayer la Asociación de Concesionarios (ACARA). Aunque ya hay más de 30 mil solicitudes, la entrega de las unidades sigue demorada por lo engorroso de los trámites. Y en las últimas semanas se sumaron la incertidumbre por el adelantamiento de las elecciones y el futuro del dólar, lo que llevó a muchos suscriptores a postergar el pago inicial del 20% que les permitiría llevarse el vehículo de la agencia. Muchos especulan con que si después de junio el billete verde trepa unos escalones, los autos se abaratarán en moneda dura.
El vicepresidente de la ACARA, Abel Bomrad, admitió que “el plan es bueno, pero tiene la lentitud de un paquidermo”. Tras una conferencia de prensa en la sede de la entidad, Bomrad precisó a Crítica de la Argentina que, de los 30 mil inscriptos, cerca de 5 mil no cumplieron con los requisitos y otros 15 mil prefirieron esperar para adelantar dinero a cambio de las llaves del auto. De los restantes, apenas la décima parte logró empezar a desplazarse sobre ruedas.
En un principio, el objetivo gubernamental era despachar 100 mil unidades a través del plan.
Los dueños de concesionarias defienden a ultranza el incentivo porque les permitió atenuar la caída que esperaban a fines del año pasado en las ventas. Pero como su eje es el financiamiento barato con fondos de la ANSES y no una rebaja de precios, la iniciativa no alcanza para convencer a quienes temen por el futuro de su empleo o de sus ingresos. Los pagos en cuotas se extienden por cinco años, un plazo que muchos clientes juzgan demasiado largo para la convulsionada economía actual.
“La gente se pregunta qué pasa con las elecciones y qué pasa que un piquetero dice: ‘Si perdemos nos vamos’”, confesó Bomrad. Así aludió a la advertencia de anteayer del dirigente kirchnerista Emilio Pérsico, luego desmentida a coro desde la Casa Rosada.
De todos modos, el empresario opinó que el plan “no es un fracaso” y que sus frutos se van a notar “en abril”. El mes próximo vaticinó que se entregarán “entre 3 y 4 mil” y que de ahí los despachos “van a ir in crescendo” en la medida en que “la maquinaria esté aceitada”.
En las agencias de venta al público estiman que las ventas caerán cerca del 20% respecto del año pasado. Aún esperan comercializar unas 470 mil unidades, aunque –aclaró Bomrad– “para saber lo que va a pasar hay que ser Mandrake”.
Hasta ahora, en el primer bimestre de 2009, la caída de las ventas fue del 16 por ciento. En algunos segmentos, como el de camiones, las ventas se desplomaron más del 35 por ciento.
Las últimas cifras tampoco son demasiado alentadoras: en marzo se patentarán 37 mil vehículos “con toda la furia”, según prevé la ACARA, frente a más de 44 mil del mismo mes de 2008. Y, para peor, las ventas que más caen son las de autos medianos. Justo los que se fabrican en el país.(CRÍTICA DE LA ARGENTINA)