Probation para empleada que hurtó $25.000 a la municipalidad rionegrina

Entre 2004 y 2005, María Gabriela Penroz, entonces empleada en el área de Tesorería del municipio de Piedra del Águila en Río Negro, adicionó mes a mes una suma de 2.000 pesos a su salario. Fue denunciada por el mismo intendente Adolfo Paine, aunque la comuna nunca inició acciones legales contra la funcionaria y, según indicaron distintas fuentes, sigue trabajando en la administración pública. Penroz ofreció devolverle a la comuna una suma de 32.000 pesos en concepto de "reparación del daño".

El viernes pasado, el juez Jorge Videla del Juzgado Multifueros de La Angostura dio lugar al pedido de "suspensión de juicio a prueba" interpuesto por la defensa de Penroz, que ahora deberá cumplir una probation. La empleada ya adelantó 5.000 de los 32.000 pesos que se comprometió a pagarle a la comuna en los próximos quince días.

También, durante dos años, deberá cumplir con el art. 27 bis del Código Penal sobre "reglas de conducta", entre las que figura la imposibilidad de cambiar de domicilio. Además deberá realizar tareas comunitarias en alguna institución de bien público (serán 36 horas de trabajo no remunerado).

Según detallaron fuentes judiciales, se accedió al pedido de "suspensión de juicio" en virtud de que en la instrucción de la causa, originada en el juzgado de Junín de los Andes, no se había especificado que se trataba de una "empleada pública", un tecnicismo que hubiera podido hacer peligrar el caso. "La probation con la reparación del daño era la mejor manera de resolver el conflicto. Además, el municipio lo aceptó y nunca accionó contra esta persona. De esta manera, en la causa penal se logra que devuelva el dinero", aseguró una fuente allegada a la causa.

La mujer era la encargada de la liquidación de los sueldos del municipio, y mes a mes, a su salario de casi 1.300 pesos, le adicionaba otros 2.000. "Los peritajes contables establecieron que sustrajo una suma de entre 25.000 y 30.000 pesos", agregó la misma fuente. Trascendió que la mujer había demostrado arrepentimiento y que justificó su accionar en que se había divorciado y no le alcanzaba el dinero para mantener a sus hijos. (RIO NEGRO ONLINE)