Riesgo la oferta local de combustibles

La volatilidad del precio internacional del barril genera diferencias en el mercado local enfrentando a las refinerías con las productoras. Estas últimas sólo buscan subir sus ganancias, incluso a costa de los consumidores Los productores de petróleo están al borde de poner en peligro el abastecimiento de combustible como consecuencia de una lucha interna que busca acomodar los precios según la conveniencia, explicaron diferentes analistas a Infobae.com.

La cara visible de las refinerías es Shell, con Juan José Aranguren en la presidencia de la compañía, seguida por Esso; y la productora más importante es Pan American Energy, dirigida por Alejandro Bulgheroni.

Con los cambios de los valores en el mundo, en la Argentina se llegó a la paradoja de pagar más por el petróleo que lo que cuesta en el mercado internacional. Pero no siempre fue así: en los últimos dos años ocurrió todo lo contrario y se llegó a diferenciales de ganancia de hasta 17 puntos.

Si las refinerías que no tienen petróleo propio -como Shell, Esso y parcialmente Petrobras- rechazan las condiciones de quienes producen, la consecuencia inmediata es la caída en la producción de combustibles y la escasez en las estaciones de servicio.

Por su parte, las productoras amenazan con una suba en los valores argumentando que buena parte de los pozos que hoy se explotan en la Argentina dejarían de ser rentables. Sin embargo, diferentes especialistas del sector descartaron dicha posibilidad.

“El sistema vigente en el mercado local sirvió tiempo atrás para proteger al consumidor, cuando el barril internacional estaba en u$s140; y ahora es útil para equilibrar el mercado interno”, explicó a Infobae.com un entendido en la materia.

Mientras que las refinerías pretenden que los valores locales del precio del barril se aproximen más a los internacionales y vuelvan a bajar, los productores buscan una suba promedio de 5 dólares en costo, número que consideran justo para seguir compitiendo.

Lo cierto es que hoy el productor, como Bulgheroni, le pide a las refinerías (es decir, Shell) que achique las ganancias como consecuencia del precio internacional del petróleo. Sin embargo, desde una de las industrias más estratégicas del país, le reprochan que cuando los diferenciales eran mayores a su favor no se comportaron de la misma manera.(INFOBAE)