ENCUENTRO CON EMPRESARIOS BONAERENSES

Scioli se comprometió a analizar su propuesta de reforma tributaria

El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, se comprometió ayer ante entidades empresariales de la provincia a no avanzar con su iniciativa de reforma impositiva, mediante la cual busca simplificar el esquema tributario provincial y que contempla extender el pago del gravamen sobre los ingresos brutos a la industria, el comercio y el agro.

El mandatario propuso a los directivos de la Federación Económica de la provincia de Buenos Aires (FEBA), la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y la Asociación de Industriales de la provincia de Buenos Aires (Adiba) conformar una mesa en la que se buscarán acuerdos para definir esa reforma.

Según dijo Scioli en la reunión, su gobierno "está abocado a producir cambios y soluciones en favor de potenciar un escenario de competitividad". El gobernador se encargó de aclarar que "no está en el espíritu del gobierno buscar una suba de alícuotas, sino un ordenamiento de todo el sistema impositivo". Y aseguró que está convencido de que "el Estado debe ser un socio estratégico y no un contrapeso para quienes producen, y mucho menos contra las pequeñas empresas".

Las cámaras empresariales llevaron a la gobernación la inquietud de sus asociados por el contenido del anteproyecto sobre el que trabajaba el gobierno, que contemplaba un incremento del 3 al 4% en el caso de los comercios y la imposición de un 1% a varios rubros de la industria y el agro, que hoy están exceptuados. El resultado constituiría más de la mitad de los ingresos propios obtenidos por la provincia. Con las modificaciones, que originalmente el gobierno preveía aprobar en junio y poner en práctica a partir del segundo semestre, el fisco provincial buscaba recaudar, según cálculos extraoficiales, unos $ 3000 millones extras.

"No es un momento oportuno para esos cambios", sintetizaron los invitados. Del otro lado de la mesa, los funcionarios asintieron. Junto al gobernador estaban los ministros de Economía, Rafael Perelmiter, y de Asuntos Agrarios y Producción, Débora Giorgi, y el director ejecutivo de la Agencia de Recaudación de Buenos Aires (ARBA), Santiago Montoya, a quien se atribuye ser el impulsor de los cambios ahora en revisión.

De hecho, según trascendió anoche, la instancia de discusión con los empresarios será coordinada por el propio Montoya.

El presidente de CAME, Osvaldo Cornide, se mostró satisfecho con el resultado del encuentro y dijo que se buscará con el gobierno "optimizar los recursos, simplificar los impuestos y lograr que el crecimiento de la actividad se conjugue con una suba de la recaudación".

Durante la reunión, los directivos comentaron algunas de sus ideas, como la supresión de Ingresos Brutos, que consideran "regresivo, de efecto piramidal y de fuerte impacto en la rentabilidad empresaria", y su reemplazo por una suerte de IVA provincial, lo que demandaría la realización de un nuevo pacto fiscal federal. Tal propuesta "implica definir el gravamen según el valor que se agrega en cada etapa", explicó el presidente de FEBA, Raúl Lamacchia, otro de los presentes en la reunión de ayer.

También plantearon al gobernador la necesidad de trasladar a la provincia el cobro del gravamen a los bienes personales, que redundaría, según su estimación, en unos $ 2000 millones para las arcas provinciales.

Scioli, por otra parte, se comprometió ante los empresarios a evaluar un reclamo histórico del empresariado provincial: reformar la ley orgánica de municipalidades para modificar la tasa de abasto y de publicidad en comercios.

La tasa de abasto se aplica en los municipios bonaerenses por los productos que entran en sus territorios por servicios de inspección sanitaria. Incluso, puede llegar a cobrarse más de una vez en el recorrido del producto por la provincia.

Los empresarios advirtieron que se trata de una tasa "distorsiva" que además repercute en alrededor de un 5% sobre el precio final del producto. La tasa de publicidad grava las marcas expuestas en la vía pública y dentro del comercio

En el presupuesto bonaerense se estimó que en el presente año entrarían por ingresos brutos $ 10.606 millones, sobre un total de los impuestos cobrados por la provincia de 15.826 millones.

Con los cambios que pensaba hacer el gobierno provincial al extender el gravamen, se sumarían unos 3000 millones de pesos extras. (LA NACIÓN)