TUCUMÁN
Un solo cajero tuvo que atender a decenas de jubilados en un banco
"Todos aquí somos personas mayores y siempre tenemos el mismo problema. No entienden que no tenemos edad para esperar tanto tiempo parados”. Cira Gómez es una de las tantas personas que aguardaba para cobrar su jubilación.
En pleno microcentro tucumano hubo quejas y malestar pero, en esta oportunidad, no se paralizaron el tránsito ni las actividades del comercio: el protagonista fue el Banco Nación, donde decenas de jubilados esperaban ansiosos cobrar sus haberes en el subsuelo de la casa central de la entidad, ubicada en Maipú y San Martín.
La gente formó tres interminables colas para esperar su turno desde temprano en la mañana. “No es posible que haya un solo cajero porque dicen que no hay presupuesto para reemplazar a los que están de vacaciones. Deberían, con el monto que nos cobra el banco por emitirnos el pago, poner personal que agilice el trámite”, dijo, indignada, María Argelia Aidar, docente jubilada. “Hay una cola para discapacitados, pero eso no cambia la situación: hay personas muy enfermas que se descomponen de tanto estar paradas”, agregó. María Aragón afirmó que la atención al cliente en la entidad financiera nacional es una falta de respeto. “No hay asientos; hay solo tres o cuatro sillas”, dijo.
Maria Villarubio, de 75 años, se quejaba de dolor: “no aguanto más estar parada; estoy desde las ocho y siempre es lo mismo. Me duele mucho la columna”.
Empleados del banco, que prefirieron resguardar su identidad, explicaron que no es sencillo encontrar empleados con las capacidades para realizar la tarea de emitir los pagos. De todas formas, tampoco hay un presupuesto para poner más cajeros, dijeron. (LA GACETA)