TUCUMÁN
Uno de cada tres empleados está en negro
Un tercio de los empleados relevados en el marco de los operativos de control que realiza el Gobierno provincial trabajan en negro, según estableció Roberto Jiménez, secretario de Trabajo de Tucumán.
Según explicó el funcionario, de alrededor de 3.000 trabajadores relevados, unos 1.050 no se encuentan registrados, de acuerdo con resultados que arrojaron los operativos de control realizados en más de 500 empresas.
El secretario de Trabajo señaló que la semana que viene se comezarían a cobrar las multas a los comercios y a las empresas que tienen a sus empleados en negro. “Primero se labran las actas con las multas y, luego, los propietarios de los negocios tienen 15 días para certificar que sus trabajadores se encuentran registrados para evitar que se ejecute la sanción”, aseguró Jimenez, que destacó que los empleadores deben corroborar que sus empleados estuvieron registrados al menos por 16 meses.
El costo de las multas son de $ 20.000 por cada trabajador que trabaje en negro. Mientras que en el caso de las empleadas domésticas que no se encuentran registradas, el costo de la sanción es de $ 3.000. “En el comercio y en el sector de la construcción es donde más trabajo en negro se registró”, recalcó Jimenez.
A la vez, el funcionario explicó que en el empleo doméstico es donde se registró un mayor porcentaje de informalidad laboral, donde en un 40% del total de hogares relevados se encontró trabajadoras en negro.
Jiménez destacó que hasta 130 inspectores realizan controles en las calles por día, mientras que se incorporó a personal femenino para hacer el relevamiento del trabajo doméstico. Además, agregó que el Gobierno continuará en las proximas semanas realizando los operativos de control.
El gobernador, José Alperovich, ya había anunciado que no se perdonaría las multas a los empresarios que, una vez notificados, no hayan regularizado la situación de su personal.
Protesta de obreros
Respecto del trabajo en negro, unos 50 obreros de la empresa Grandi Construcciones realizaron una protesta en reclamo del blanqueo de la totalidad de los trabajadores y el cumplimiento íntegro del convenio colectivo que nuclea al sector. “Después de mucha insistencia, se logró que se realice el operativo de control; sin embargo no vislumbramos ninguna solución”, dijo Francisco Banegas, quien afirmó que hace dos años que trabaja en negro.
Agregó que ayer los empleados se presentaron a trabajar al horario convenido, pero les fue negado el acceso a las obras. “Se nos advirtió que si se presentaban autoridades de la Secretaría de Trabajo debíamos escondernos y no brindar ningún tipo de información”, dijo Marcelo Banegas.
El empresario, César Grandi, negó los dichos de los trabajadores. “Todos los obreros de la empresa están blanqueados. El elemento básico que está en discusión no es su registración, sino sus pretensiones de aumentos salariales”, dijo. Agregó que la empresa sufrió las inspecciones de control de empleo en negro, como la mayoría de las obras de la provincia, y que de allí surge la veracidad de sus afirmaciones.
“El problema está dado por la búsqueda de aumentos salariales. Hay gente más o menos calificada para el trabajo, y reciben un sueldo de acuerdo a estas consideraciones, como en todo ámbito laboral”, concluyó el empresario. (LA GACETA)