Advirtió el FMI que la crisis financiera será de largo alcance

El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió ayer que habrá una crisis financiera mundial de largo alcance como consecuencia de las turbulencias en el sector inmobiliario de Estados Unidos. "Tras un largo período de condiciones financieras favorables, los mercados internacionales están atravesando una etapa difícil", señaló el FMI en un documento denominado "Reporte de la estabilidad financiera global".

Los riesgos de deterioro han aumentado "sensiblemente" y, en caso de que se concreten, el período de turbulencias tendrá "consecuencias de largo alcance", señaló el organismo.

En un sentido similar se expresó el director gerente del FMI, Rodrigo Rato. El funcionario señaló que la reciente crisis financiera "se está corrigiendo lentamente", pero advirtió que sus efectos sobre la economía real se empezarán a notar en 2008, sobre todo, en Estados Unidos.

En declaraciones a los periodistas antes de participar en la Conferencia Anual del Club de Roma, que se celebra en Madrid, Rato recordó que la situación que este verano boreal vivieron los mercados financieros fue una crisis "seria", cuyos efectos comenzarán a notarse en 2008, especialmente en Estados Unidos, mientras que en Europa el impacto será menor.

El documento del FMI indicó que "los mercados están tomando conciencia del grado de deterioro que sufrió la disciplina crediticia durante los últimos años, sobre todo, en el sector de las hipotecas de alto riesgo y del crédito apalancado en Estados Unidos, pero también en otros sectores de créditos conexos".

Turbulencias Los problemas del mercado inmobiliario estadounidense, especialmente en el sector de las hipotecas de alto riesgo, han causado una contracción en la industria de la construcción y un aumento en la ejecución de las hipotecas. Esa situación originó turbulencias en Wall Street y las principales bolsas de Europa, Asia y América latina, durante los últimos dos meses.

Rato destacó que el crecimiento mundial en 2008 será "levemente inferior" al de 2006 y 2007, y señaló el desafío que tiene la sociedad en áreas como "la globalización financiera, las tensiones en política ambiental, principalmente por el cambio climático, y las tensiones por los cambios demográficos".

Sobre la crisis en los mercados financieros, dijo que "es tos sucesos deben ser una enseñanza para los reguladores, para que se aumente la transparencia y que se asegure que hay incentivos para que los mercados funcionen".

Según el documento del FMI, estos problemas causaron una "desinversión en algunos activos riesgosos y un despalancamiento, lo cual, a su vez, acrecentó los diferenciales del crédito en las clases de activos y la volatibilidad en los mercados de renta fija y variable". La desconfianza creó "problemas en algunos mercados de dinero y dificultades de financiamiento para algunas instituciones financieras, debido a que algunas contrapartes se mostraron reacias a otorgar crédito a prestatarios que presuntamente manejaban activos sin liquidez y de menor calidad".

El organismo financiero internacional advirtió que "no se pueden subestimar las consecuencias que puede acarrear este episodio" y vaticinó que el proceso de ajuste "probablemente será dilatado". Por otra parte, señaló que si bien al comienzo de este período turbulento la "economía mundial y sobre todo los países emergentes gozaban de un crecimiento sólido", cabría esperar "cierta desaceleración". (LA NACIÓN)