SERVICIO PÚBLICO
Aumentaría 20% a partir de enero el transporte urbano de pasajeros
A una semana del traspaso presidencial, el Gobierno habría aceptado terminar con el congelamiento tarifario que rige desde el año 2001 para el transporte público del área metropolitana.
A partir del 10 de enero, las tarifas de los colectivos, subtes, trenes y el premetro aumentarían 20%, en promedio. Según los cálculos oficiales ese ajuste implicará una reducción de $ 600 millones anuales en los subsidios que desembolsa el Estado a las empresas transportistas.
Así lo revelaron a Clarín fuentes empresarias. Y el Gobierno admitió que la medida está en estudio. El incremento sería aplicado por medio de una resolución del Ministerio de Planificación Federal. Y se publicaría esta semana en el Boletín Oficial.
A diferencia de otros ajustes tarifarios de servicios públicos, esta vez el presidente Néstor Kirchner resolvió aprobar los aumentos con casi un mes de anticipación con el fin de dejarle el camino despejado a la futura administración de su esposa Cristina, que arrancará dentro de una semana.
Las subas que regirían desde el primer minuto de 2008 en el transporte público metropolitano serán las siguientes:
Colectivos: el boleto mínimo en la Capital Federal y el Gran Buenos Aries aumentará un 20% y pasará de 75 a 90 centavos. Las restantes secciones de recorridos que llegan hasta los 36 kilómetros también tendrán un ajuste promedio del 20%.
Trenes: Los servicios eléctricos y diesel de la región metropolitana registrarán un incremento del 18% promedio, al pasar la tarifa media de 55 a 65 centavos.
Subterráneos: la tarifa para viajar en la red porteña de subtes volverá a ser igual que el boleto mínimo de colectivo y trepará de 70 a 90 centavos, con un incremento del 28,5%.
Premetro: el viaje en el sistema de Premetro, que recorre la zona sur de la Capital Federal aumentará un 20% y saltará de 50 a 60 centavos.
Junto con el agua potable y la red cloacal, el transporte público integra el lote de los servicios públicos que -hasta ahora- lleva casi siete años sin retoques tarifarios, pese a que la inflación acumulada en ese período ya se ubica en el 103,1%.
Tras la crisis económica y social que se produjo a fines de 2001, el gobierno de Eduardo Duhalde puso en práctica un esquema de subsidios tarifarios y de aportes económicos que, en principio, iba tener una duración transitoria.
Pero, tras el desembarco de Néstor Kirchner en la Casa Rosada en mayo de 2003, el pago de subsidios para evitar los incrementos de tarifas se convirtió en una práctica habitual, que implicó para el Estado un desembolso creciente de fondos públicos hacia las compañías transportistas.
Según las reglas de juego vigentes, los mayores costos operativos y los aumentos de salarios que las empresas no pueden trasladar a los boletos son compensados por el Estado mediante el pago de subsidios compensatorios.
De esta manera, los subsidios al transporte que en el año 2003 totalizaron cerca de $ 760 millones treparon en el 2006 a casi $ 2.100 millones. Las proyecciones actuales indican que para este año los subsidios y las compen saciones tarifarias superarán los $ 2.700 millones.
Además de descomprimir los reclamos de los empresarios, la recomposición tarifaria que Néstor Kirchner resolvió autorizar en su última semana de gestión servirá para mejorar las cuentas fiscales de la próxima administración.
Según los números que manejan los funcionarios de Transporte, la suba del 20% que regirá desde enero representará para las cuentas públicas un "ahorro" de 600 millones de pesos anuales.
Esa suma -que se trasladará a los bolsillos de los usuarios- más los ingresos adicionales que aportarán los últimos aumentos aplicados a las retenciones a las exportaciones agrícolas y petroleras le permitirán a Cristina Kirchner mostrar en sus primeros meses de gestión una sensible mejora en el superávit fiscal. (CLARÍN)