Bienes Personales del exterior: podrían fijar suba en el 2,25%
Por ahora es un debate que se tiene que resolver puertas adentro, según explicó el tributarista Alberto Mastandrea -referente en temas impositivos de la consultora BDO-, que asesora al Gobierno en lo relacionado con la reforma tributaria desde el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Ciudad de Buenos Aires.
Se trata de otro impuesto que se aprobó de manera transitoria, pero que tiene chances de quedarse. Funcionarios del Gobierno analizan la alternativa de dejar de manera permanente la alícuota incrementada al 2,25% del Impuesto a los Bienes Personales para los contribuyentes que tienen bienes en el exterior en caso de que no prospere el Impuesto a la Riqueza. Por ahora es un debate que se tiene que resolver puertas adentro, según explicó el tributarista Alberto Mastandrea -referente en temas impositivos de la consultora BDO-, que asesora al Gobierno en lo relacionado con la reforma tributaria desde el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Ciudad de Buenos Aires.
El polémico impuesto a la riqueza ya cuenta con dictamen de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de Diputados. Se aplicaría por este año y prevé una recaudación de casi 1 punto del PBI. Pero recogió fuertes críticas, entre otras de la UIA, porque de la manera en que está redactado se incluyen activos como maquinarias o galpones, además de los financieros.
Según señaló Mastandrea, hay dudas sobre el impuesto entre los propios funcionarios del área económica. El especialista explicó que hay un grupo que entiende que la idea se va a llevar a cabo. En cambio, otro considera que no va a prosperar y propone dejar fija la alícuota del 2,25% del Impuesto a los Bienes Personales para aquellos que tienen fondos en el exterior. Esa alícuota incrementada se incluyó en la Ley de Emergencia de principios de año, pero grava sólo a los bienes declarados en los períodos 2019 y 2020. Para 2021 en teoría ya no se pagaría. Si no prospera el Impuesto a la Riqueza se podría analizar entonces como alternativa.
El analista indicó además que muchas empresas exportadoras de servicios “ven con preocupación” el tipo de cambio de $102 que figura en el Presupuesto 2021. Aseguró que si queda así, tendrán que “redomiciliar” sus actividades, debido a que soportan incrementos de costos por la inflación.
El tributarista aseguró que algunas medidas que está tomando el Gobierno “son buenas” pero que están fuera de tiempo. Mencionó los requisitos que tiene de repatriación de capitales. A su entender los proyectos para incrementar impuestos sobre las manifestaciones de activos va a terminar jugando en contra del nuevo blanqueo atado a inversiones en el sector de la construcción.
En otro aspecto, advirtió que como la AFIP dispuso este año que no se inicien juicios ni embargos, en el marco de la crisis, se está incrementando la “mora irregular” con el organismo porque las tasas de interés que percibe quedaron atrasadas. “Hay empresas que están endeudadas en sistema formal, con planes de pago. Para la mora informal la tasa es baja, en comparación con entidades financieras”, explicó el tributarista.
En otro aspecto, el analista de BDO dijo que hay también un grupo de empresarios que empieza a ver oportunidades con relación al futuro. Sería el caso de Francisco De Narváez, que le compró a la cadena norteamericana Wal-Mart su operación en Argentina. “Entienden que puede ser una decisión no tan racional, pero consideran que Argentina va a despegar en el largo plazo”, explicó.
Por Carlos Lamiral
Fuente: Ámbito.com