Company Builders. Empresas que crean empresas.
Son empresas que crean empresas, un modelo que se expande alrededor del mundo, basado en novedosas oportunidades de negocio, desarrolladas por selectos equipos de recursos humanos.
Las fábricas de compañías, conocidas como company builders , no son nuevas, pero se encuentran en plena expansión en el exterior, con exponentes como Betaworks, en los Estados Unidos, y Rocket Internet, de origen alemán y creadora de Dafiti. En la Argentina, el concepto fue popularizado el año pasado con Quasar, creada por el trío fundador de Officenet, vendida a Staples.
Mientras se fortalece el ecosistema, la tendencia sigue en expansión. Eastpoint Ventures, Istanbul, Njambre e Incutex son otros co-creadores de empresas comandados por locales.
El fundamento es reducir las posibilidades de fracaso que afronta un alto porcentaje de los emprendimientos con capital, asesoramiento, visión sobre el mercado, experiencia y contactos, que suelen tener quienes comandan estas firmas. Todo contribuye a crear proyectos escalables y aptas para internacionalizar. "El company builder se queda con una participación accionaria de las compañías, en contraprestación por lo que les aporta y el tiempo y recursos comprometidos. Eso asegura el alineamiento de intereses entre todas las partes en los proyectos", describen en Istanbul, dedicada a laspuntocom .
Ariel Muslera es uno de los fundadores de Eastpoint, en funcionamiento desde hace más de un año. La define como "una start up que crea start ups". "Veíamos, como inversores, que muchas ideas eran repetidas. Y que faltaba un análisis más profundo y exhaustivo de las industrias para encontrar negocios viables en la región". La ecuación, cuenta, no cerraba para las inversiones de riesgo en tecnología. Salvo excepciones. Entonces, decidió junto a sus socios, en lugar de invertir pequeños montos en decenas de compañías, potenciar y aumentar las chances en cada firma en la que se involucraran.
Tan es así que Eastpoint se fijó como objetivo construir dos o tres empresas por año con foco en negocios, para desarrollos B2B (de empresa a empresa), sin previsiones sobre las salidas. Hoy, trabaja en dos proyectos. "Analizamos sectores específicos (salud, educación yreal state ), e identificamos modelos de negocios digitales que se puedan desarrollar en la región", precisa Musiera. La otra pata es la búsqueda de emprendedores con experiencia, dispuestos a formar una sociedad. Del otro lado de la mesa, la ventaja es un despegue menos costoso, con recursos para el primer año de operaciones y un modelo de negocio analizado.
La cordobesa Incutex, impulsada por un emprendedor de la provincia creador de la firma de software Santex, también concentra sus esfuerzos y capitales en un puñado de ideas digitales. Leandro Pisaroni Gerbaldo, director de Incutex, hace hincapié en lo importante que es en este modelo la experiencia de los mentores y su expertisse para optimizar recursos y crear modelos sustentables en el tiempo. Los company builders llevan a cabo un proceso de inversión: "Invertimos capital propio en research y desarrollo del plan de negocios, hasta el armado de la primera ronda de inversión.
De ahí en más, cada compañía vive del aporte inicial de capital (ángeles o venture capita l) y luego de su generación de ingresos y/o de futuras rondas", describen en Istanbul, que fondeó Hinchas y Musicuo durante 2013.
Njambre matiza el modelo con el de una incubadora, orientada a empresas sociales ambientales. "Tenemos una visión de ONG, pero operamos como una empresa", explica Federico Seineldin, cofundador de Openware -vendida a Globant-, y cofundador de Njambre. Seineldin marca la diferencia con otros inversores de start ups : "No buscamos hacer una diferencia y dejar el proyecto, sino estar más tiempo en la operación. Nuestro objetivo es crear un holding de empresas de innovación e impacto". Con una meta bien definida, en Njambre "mapean" problemas, construyen hipótesis de solución y luego van a buscar al equipo que lo ejecute en forma conjunta. Idea, proyecto y personas también surgen del espacio de coworking de Njambre, en Parque Patricios. Arbusta, una firma de outsourcing de servicios digitales en sectores postergados, es una de ellas.