De aprobarse el proyecto, las empresas deberán repartir ganancias a partir de 2012

El diputado nacional Héctor Recalde estimó ayer que de aprobarse el proyecto de distribuir parte de las ganancias de las empresas entre los trabajadores, comenzaría recién a partir de 2012.

Tras señalar que el proyecto “atrae y alienta inversiones”, el diputado confirmó que aunque originalmente la división de utilidades se daría en las empresas de más de 300 empleados, finalmente se estableció contemplar también las ganancias de cada una, más allá de la cantidad de trabajadores.

“No es cierto que es una ley antiempresa, al contrario, si el trabajador sabe qué gana va a querer que gane más”, afirmó el abogado de la CGT en diálogo con los medios de prensa.

Al respecto, agregó que se trata de un proyecto que “atrae y alienta inversiones, porque los trabajadores argentinos van a estar muy interesados en que la empresa gane”.

En cuanto al corte a partir del cual una empresa será considerada o no dentro de la ley, Recalde indicó que será “a partir de 300 trabajadores en una primera etapa”.

No obstante, confirmó la conformación de un “consejo tripartito” que “va a definir las ganancias también”, integrado por “cuatro representantes del Estado, cuadro de los empleadores y cuatro de los trabajadores”, que va a “atender a situaciones de asimetrías regionales y las estructuras de costos”.

Este consejo va a determinar “a partir de qué porcentaje de las ganancias se participa a los trabajadores”, es decir que todas las empresas con más de 300 empleados caerían bajo los términos de la ley, pero también aquellas que sean consideradas con ganancias extraordinarias.

Lo que deberán compartir es “el 10 por ciento, una vez establecido el piso”, señaló.

En cuanto a la entrada en vigencia, el diputado Recalde pidió, “para desalentar expectativas que se están generando”, aclarar que “esto va a ser un proceso gradual”, que se estará aprobando recién a principios del año próximo.

(El Tribuno)