EN EL MEDIO DEL CONFLICTO AGRARIO

Designan a Echegaray como titular del ente que otorgará subsidios al agro

En medio de la expectativa en torno al inicio del diálogo con los ruralistas, el Gobierno oficializó hoy la designación de Ricardo Echegaray, el ex jefe de la Aduana, como nuevo titular de la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca).

El organismo, que depende de la Secretaría de Agricultura, es una pieza clave del conflicto con el agro ya que será el encargado de distribuir las compensaciones y reintegros a pequeños productores que el Gobierno prevé ofrecer a las entidades para descomprimir la crisis.

El nombramiento de Etchegaray, un santacruceño que goza de la confianza del ex presidente Néstor Kirchner, se dispuso a través del decreto 606/08 que se publica en el Boletín Oficial de hoy. Su designación implica mayor presencia del ex mandatario en el conflicto con el agro.

Tras un paro de 21 días, los ruralistas dispusieron una tregua de un mes y ayer, después de días de incertidumbre, la presidenta Cristina Kirchner decidió convocar a los líderes de la Sociedad Rural, Confederaciones Agrarias Argentinas (CRA), Coninagro y la Federación Agraria a una reunión en la Casa Rosada.

Con el nombramiento, Echegaray que reemplazará a José Portillo, un técnico de carrera, concreta su retorno al Gobierno pocos días después de haber sido desplazado de la Aduana por un duro enfrentamiento con el ex titular de la AFIP, Alberto Abad, que también dejó el cargo.

Entre otras cosas, la Oncca administra las compensaciones y distribuye la codiciada cuota Hilton (los cortes cárnicos de mayor calidad y precio que se exportan a la Unión Europea, un negocio valuado en cerca de US$ 300 millones).

Desde marzo de 2007, cuando empezó a funcionar, la Oncca distribuyó $ 1500 millones en subsidios a la industria alimenticia y los productores agropecuarios para mantener estables los precios de la harina, carne, pollos, aceites y lácteos, entre otros alimentos.

Este año, según las cuentas que venía haciendo Portillo, por el crecimiento del número de empresas en condiciones de reclamar las compensaciones y por el aumento de los precios internacionales, esa oficina necesitaría entre 3000 y 4000 millones de pesos para pagar los subsidios. (LA NACIÓN)