Deuda: Luis Caputo convalidó leve suba de tasas y colocó $6,99 billones
En la primera licitación de deuda en pesos de septiembre, el Ministerio de Economía colocó este miércoles $6,99 billones. Así, consiguió lo justo para refinanciar los abultados vencimientos de esta semana. Para conseguirlo, el equipo de Luis Caputo tuvo que convalidar una leve suba de tasas respecto de lo que pagó en la subasta previa y también de los rendimientos del mercado secundario.
La Secretaría de Finanzas, que encabeza Pablo Quirno, había puesto sobre la mesa nueve títulos: seis letras capitalizables a tasa fija (LECAP) y tres bonos atados a la inflación (BONCER). En la licitación, recibió 4.756 ofertas por un monto total de $7,24 billones, de los cuales adjudicó $6,99 billones.
Se trató de una licitación desafiante ya que esta semana vencen $6,97 billones, concentrados en una LECAP que recibió el flujo de los bancos durante la estrategia de migración de deuda desde el Banco Central hacia el Tesoro. De hecho, septiembre es el mes de mayor carga de vencimientos del año, con alrededor de $14 billones.
Con todo, el Palacio de Hacienda pudo renovar la totalidad de los pagos semanales, aunque prácticamente cerró sin financiamiento extra. Es algo que procuró hacer a lo largo del año ya sea para engrosar el colchón de liquidez que el Tesoro mantiene depositado en el BCRA o para comprar dólares con vista a garantizarles a los acreedores el próximo pago de intereses de la deuda externa en enero.
Deuda: detalles de la licitación Algo más de la mitad del monto colocado se concentró en las tres LECAP más cortas. Fueron $2,18 billones a diciembre de 2024, $1,25 billones a febrero de 2025 y $608.909 millones a marzo, en los únicos tres instrumentos a los que Finanzas les había puesto un monto máximo para evitar que los bancos concentren aún más en letras de corto plazo.
Además, Economía colocó $995.916 millones en una LECAP a abril, $717.552 millones en una a mayo y $828.692 millones en una a septiembre de 2025.
Entre los bonos atados a la inflación, el más demandado fue el BONCER a marzo de 2025. En ese instrumento adjudicó $235.082 millones. Finalmente, colocó $153.370 millones en un BONCER a marzo de 2026 y $23.497 millones a marzo de 2027.
Licitación con suba de tasas Uno de los datos en los que repararon en la City fue que, para garantizarse la refinanciación de los vencimientos, Caputo tuvo que convalidar rendimientos algo más elevados para los inversores. En el caso de las LECAP, pagó 3,75% de tasa efectiva mensual (TEM) a diciembre; 3,9% a febrero, marzo y abril; y 3,95% a mayo y septiembre. En tanto que los BONCER cortaron con tasas reales del 5,6% a 2025, 8,7% a 2026 y 10,5% a 2027.
"Pagó algo más de tasa el Tesoro respecto de la licitación previa pero no en tanta disonancia contra el cierre del mercado secundario", sostuvo el economista Salvador Vitelli, head of research de Romano Group. Aunque aclaró que la parte larga de la curva de LECAP "sufrió post-dato de inflación" (el 4,2% de agosto, que fue más alto de lo esperado) y planteó que, de no haber sido por eso, "la diferencia entre el mercado secundario y la licitación hubiese sido aún mayor".
En la subasta anterior, Economía había pagado, por ejemplo, 3,78% TEM por una LECAP a febrero y 3,88% TEM por una letra a agosto de 2025.
"El Tesoro tomó 96% de las posturas ofrecidas, teniendo que pagar un premio en el caso de las LECAP. Aun así, sólo le alcanzó para cubrir los vencimientos del viernes", analizaron desde la firma Puente tras la licitación.
Luis Caputo, deuda, crédito y refinanciación más ajustada De cara a los abultados vencimientos de septiembre por unos $14 billones en total, el propio Caputo había abierto el paraguas este martes por la noche en el streaming del Palacio de Hacienda sobre un eventual roll over más ajustado. Allí, dijo que era “probable que, en una refinanciación, los bancos no hagan el refinanciamiento total”, aunque ligó esa posibilidad a una recuperación de la demanda de dinero y del crédito.
En ese sentido, afirmó que fue con el objetivo de abastecer esa necesidad de remonetización que decidieron mantener un abultado colchón de liquidez depositado a tasa cero en la cuenta que el Tesoro tiene en el BCRA. Hasta el viernes pasado, esos depósitos sumaban $17,53 billones, de los cuales $16,78 billones eran en pesos. “Si no hay un full refinanciamiento, nosotros tenemos reservas en pesos en el Central para que los bancos los tengan y los puedan aplicar al crédito”, insistió.
Al respecto, desde Portfolio Personal Inversiones (PPI) resaltaron que, con la liquidez depositada en el BCRA y en el Banco Nación, el Gobierno podría afrontar el 77% de los vencimientos de los próximos tres meses (incluido septiembre) hasta en un hipotético e improbable caso de que se perdiera el acceso total al mercado local”. La improbabilidad de ese escenario, según muchos analistas, radica en la continuidad del cepo, que limita las vías de dolarización de carteras. Un factor que, en sentido contrario, dificulta la refinanciación de la deuda externa de cara a la montaña de vencimientos en moneda extranjera del próximo año, como plantearon Domingo Cavallo y otros economistas.
"En la medida en que se recomponga la demanda y sobre todo, la oferta de crédito, es esperable que los bancos reduzcan su exposición al Tesoro, que es la más alta en muchos años, para expandir sus préstamos al sector privado, lo cual es bienvenido", señaló el equipo de estrategia de Puente. Aunque apuntaron: "De cualquier manera, no se puede descartar un efecto de crowding out que resulte en tasas más altas cuando el Tesoro compita por esta liquidez con el sector privado".
En lo que resta del año, los vencimientos de deuda en pesos, ascienden a algo más de $25 billones. La próxima parada será en la licitación programada para el 26 de septiembre, en la que enfrentará compromisos por alrededor de $7 billones.
Fuente: Ambito