El BCE confía en alcanzar su objetivo de inflación de 2% para el 2025
El Banco Central Europeo (BCE) confía en que la lucha contra la suba de precios será exitosa y que para el año próximo logrará llevar el nivel de la inflación en el bloque a su objetivo declarado de 2% anual.
Así lo indican las actas de la reunión de diciembre que concluyó con un recorte en las previsiones de inflación en toda la eurzona, y también con una revisión a la baja en las estimaciones de PIB para 2023 y 2024.
"En general, el proceso de desinflación parece continuar a buen ritmo, y probablemente de forma más fuerte de lo que se esperaba", señala el documento. "La caída de la inflación está siendo esperanzadora, y se ha producido de forma general, en todos sus principales componentes", continúan, y admiten que "esto sienta las bases para un aumento de confianza respecto a la posibilidad de que la inflación caiga hasta su objetivo", señalan.
Ahorro Una de las principales preocupaciones del BCE en los últimos meses está relacionada con los salarios. En el tercer trimestre de 2023 el avance salarial en la zona euro volvió a tocar el nivel récord del 5,3% interanual, algo que, sin embargo, no empaña el optimismo que están mostrando los banqueros centrales, también en este frente. "Hemos visto algunas señales de que el crecimiento salarial se está estabilizando, o cayendo, y en la reunión se argumentó que los salarios son un indicador que llega con retraso", destacan.
Para los banqueros europeos la transmisión de su política monetaria está "procediendo con fuerza y ha ayudado a frenar las presiones inflacionarias tanto en bienes, como en servicios", y creen que los efectos de la seguidilla de subas de tasas y reducción del balance de activos se van a acelerar en los próximos trimestres, ya que se está terminando el ahorro acumulado durante la pandemia, un colchón que en los últimos años ha servido para mantener fuerte la economía europea.
"En el encuentro se enfatizó que los colchones de ahorro de las familias y de las empresas, que limitaron el impacto de la política monetaria en la demanda agregada, van a reducirse junto al balance del BCE. Esto sugiere que el impacto de las condiciones financieras duras va a ser más fuerte de lo que se espera en los próximos trimestres", indican las actas.
Vigilancia Todo esto contribuirá a que, como señaló el BCE en diciembre, se cumpla el escenario de una inflación en el 2% ya en el año 2025, lo que les permitirá concluir que su objetivo ha sido cumplido. "Los miembros han expresado una mayor confianza en que la inflación se va a reducir hasta el objetivo del 2% en 2025", señalan.
Sin embargo, haciendo gala de su habitual prudencia, algunos miembros quisieron dejar claro que es necesario tener "paciencia" y que deben seguir siendo "vigilantes", además de que será necesario "mantener un enfoque restrictivo durante un tiempo".
No obstante, la situación geopolítica amenaza con volver a presionar al alza la inflación, algo de lo que el BCE es muy consciente.
Fuente: Diario BAE