Flyest fue a concurso de acreedores y ya busca un nuevo dueño
La aerolínea regional Flyest, que realizaba vuelos entre el Aeroparque Metropolitano, Montevideo y la ciudad de Santa Fe, se convirtió en la primera línea aérea del mercado argentino que planta bandera frente a la pandemia. El grupo empresario que maneja la compañía pidió la apertura del concurso de acreedores y se mueve activamente para encontrar un comprador.
En marzo de 2017, cuando Flyest llegó a la Argentina, el plan oficial era “invertir 697 millones de pesos, contar con una flota de 4 aviones y generar 120 nuevos empleos directos para pilotos, tripulantes y operarios argentinos y otros 1.000 empleos indirectos”.
Las nuevas operaciones de Aerolíneas Argentinas significan más de 2100 asientos disponibles para el regreso de argentinos desde el exterior. Informate más Aerolíneas Argentinas programó nuevos vuelos desde Cancún, San Pablo, Miami y Madrid Pero no salió como estaba pensado. La suba de los costos dolarizados tras devaluaciones del peso agravaron un panorama marcado por la caída de la actividad económica. Hasta que llegó la pandemia para dar el golpe final. Ahora la empresa tiene 39 trabajadores y quedó sólo con un avión.
El 51% de Flyest pertenece al empresario argentino Gustavo Cebreiro, que lidera a un grupo de exdirectivos de la desaparecida aerolínea Sol. El restante 49% está en manos del grupo español Ilai que tiene base en Valencia y es controlante de la línea aérea Air Nostrum, que realiza vuelos regionales en la zona del Mediterráneo. Su decisión es vender y retirarse de Argentina.
Está presidido por el empresario Carlos Bertomeu, quien informó recientemente a través de la prensa española que Flyest “ha recurrido a la herramienta jurídica del concurso preventivo para reorganizar la situación financiera y buscar soluciones que permitan su supervivencia”.
Explicó además que “la mayor crisis de la historia de la aviación mundial generada por la pandemia, ha obligado a la dirección de Flyest a adoptar esta decisión que está en la misma línea de las que se están viendo obligadas a tomar muchas otras compañías”.
Los empresarios españoles dejaron trascender su preocupación particular por la situación en Argentina, ya que el Gobierno no aprobó plan alguno de asistencia para las líneas aéreas, a diferencia de lo que ocurrió en Europa y Estados Unidos: “Esto agrava la situación, porque además el gobierno argentino extendió el cerrojo a los vuelos hasta el 1 de septiembre”.
Frente a este panorama, destacaron que la dirección de la empresa “continúa manteniendo reuniones con posibles inversores interesados y trabaja en otras posibles soluciones que permitan la supervivencia de Flyest”.
La decisión de salir del mercado argentino ya está tomada y ni siquiera tienta a los españoles la posibilidad de que los vuelos domésticos se reanuden a mediados de julio y no tengan que esperar hasta septiembre, tal como viene insinuando el Ministerio de Transporte frente a los reclamos de las compañías.
Ilai también tiene inversiones en Paraguay, donde es dueño de la aerolínea Paranair, que aplica un plan de ajuste complicada por el impacto de la pandemia y las restricciones de vuelos.
El grupo además venía trabajando en un proyecto para operar una línea aérea en Brasil, pero ahora lo dejó en compás de espera hasta que el panorama se aclare.
En tanto, en España Air Nostrum comenzó a organizar un cronograma de operaciones que se extiende a medida que las autoridades flexibilizan las restricciones en la pospandemia. La compañía recibió un auxilio de 120 millones de euros por parte de un consorcio de bancos.
Por Jorge Velázquez
Fuente: Ámbito.com