Grobocopatel compra otro molino y ya es uno de los mayores productores del país
El grupo Los Grobo no deja de expandirse en el país y en el exterior. La empresa, que es símbolo de los agronegocios en la región y siembra casi 270.000 hectáreas en el Mercosur, acaba de comprar otro molino, esta vez en Entre Ríos, para crecer en la elaboración de harina de trigo. Se trata de la firma El Tala, que entró en concurso de acreedores a principios de 2007 y que ahora volverá a producir.
El director ejecutivo del grupo Los Grobo, Juan Goyeneche, informó a El Cronista que la empresa pagó u$s 2,5 millones para adquirir el establecimiento centenario, que tiene una capacidad de molienda diaria de 130 toneladas. Con esta adquisición, el grupo logra su tercer molino en el país –que se suma a los que ya posee en Bahía Blanca y Chivilcoy– y totaliza las 1.000 toneladas de molienda a nivel mundial: 800 en la Argentina y 200 en Brasil.
Este volumen de producción lo ubica entre los 10 molineros más grandes de la Argentina, con una producción que se reparte entre el mercado interno (60%) y la exportación (40%).
Además de abastecer la fábrica de pastas que Los Grobo está construyendo en Chivilcoy, en la que invertirá u$s 5 millones, el molino de Entre Ríos estará destinado a exportar más harina de trigo al principal comprador argentino: Brasil. El gran socio del Mercosur, que consume el doble del trigo que produce, se llevará cerca del 70% de la harina producida en El Tala.
En paralelo, Los Grobo tienen en carpeta una ampliación que llevará al molino a más del doble de su capacidad. Con una inversión de u$s 1,5 millones mediante, se procesarán 280 toneladas diarias.
La apuesta de Los Grobo refleja el interés por integrarse hacia adelante, presumiblemente, para sortear los avatares de un mercado incierto como es el de los commodities agropecuarios en el mundo. Más aún en la Argentina, donde cambia demasiado seguido el esquema tributario y no hay una decisión clara sobre la política alimentaria, que se regula hoy con intermitentes cierres de las exportaciones de trigo y maíz.
La inversión del grupo refuerza, además, la concentración del sector agropecuario que ya está promovida, en primera instancia, por los altos precios de los alquileres que obligan a los productores a jugar en las grandes ligas o retirarse. La salida para quien tiene espalda parece ser la diversificación y la integración hacia adelante.
Por eso, 10 años después de ingresar en el negocio de la molinería con la compra de su primer molino, el de Bahía Blanca, Los Grobo invierte u$s 5 millones en una planta que producirá 1.600 toneladas mensuales de pastas para el mercado interno y para la exportación.
No habrá marca de fideos Los Grobo. La firma los producirá para empresas alimenticias con las cuales aún está negociando. Se supone que estarán listos para comercializar su primera partida para marzo de 2011.
(El Cronista)