La Aduana lanza dos sistemas para controlar mejor el comercio exterior

Tras un 2009 sumamente complejo para los operadores del comercio exterior, los expertos ya vislumbran para el año próximo una recuperación de los flujos de exportación e importación, de la mano de la incipiente recuperación de la economía mundial.

En este contexto, si bien los empresarios verán una reactivación de la demanda, deberán hacer frente a un mercado más pequeño. Así, las variables asociadas a la competitividad, como la disminución de costos y tiempos, se tornan indispensables.

Frente a esto, la Dirección General de Aduanas (DGA) avanza en su programa de facilitación y control del comercio exterior.

En efecto, hasta el momento ya lanzó cuatro sistemas de operadores confiables: el de exportadores, empresas logísticas, Pyme y despachantes.

Y ahora trabajan contrarreloj para habilitar dos nuevos sistemas: el de importadores y el de empresas de servicios de transporte aeroexpreso (couriers), a quienes le ampliarán el límite de carga permitido.

El objetivo, según adelantaron desde el organismo, es tener estos programas operativos antes de fin de año.

“La receta de la Aduana argentina fue ir por cada una de las partes de la cadena y no declarar un operador confiable en general, porque esto nos está permitiendo optimizar los tiempos para implementar más rápido un sistema exclusivo para cada necesidad”, explicó la titular de la DGA, Silvina Tirabassi, en una entrevista con este medio.

La funcionaria destacó que uno de los puntos fundamentales de la gestión es, justamente, “desarrollar toda la línea de seguridad y facilitación con los programas de confiabilidad. La Aduana facilita cuando conoce con quién está trabajando. Entonces hacemos más débiles todos esos reclamos que pedían facilitación sin fundamentos”.

Radiografía de los programas Los sistemas de operadores, de acuerdo a la DGA, ofrecen ventajas tanto para el Estado como para las empresas que deciden participar en él.

En primer lugar, le permite a la Aduana obtener una profunda radiografía sobre los movimientos de la empresa y analiza a fondo sus vínculos con el resto del mundo, ya sean proveedores o clientes. De este modo, desarrollando un control sobre toda la cadena logística –que incluye seguimiento satelital, precintado de contendores, escaneo de carga, circuito cerrado de televisión para el control del consolidado y desconsolidado de contenedores- logran llevar al mínimo riesgos como el tráfico, la subfacturación o el fraude marcario.

Como contrapartida, la empresa logra una importante baja de costos, ya que el trámite aduanero puede realizarlo en su propio establecimiento y puede manipular la carga en el punto que desee –siempre y cuando esté habilitado-, evitando de esta manera detener su carga en el puerto de ingreso.

Sistema de Importadores Confiables A la hora de profundizar sobre este programa, la titular de la DGA destacó que “venimos trabajando muy fuerte con todos los actores que participan en el Consejo Consultivo Aduanero. En este caso en particular estuvimos intercambiando ideas con la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en la Argentina y con la Cámara de Importadores”.

La funcionaria destacó que “es un sistema fundamental para el control y facilitación porque, a diferencia de los exportadores, el importador no presenta tanta estabilidad ya que un único operador puede ingresar al país una amplia gama de productos”.

“Es una iniciativa que implica un gran desafío para la Aduana”, aseguró la titular de la DGA.

En este contexto, Graciela Misuraca, directora de la Dirección de Gestión del Riesgo, explicó a este medio que, para poder acceder a este programa “hay condiciones básicas que las empresas deberán cumplir, de manera que su actividad comercial esté reflejada en su patrimonio y su situación tributaria. La idea que se busca es la transparencia”.

Al respecto, destacó que “no se trata de un programa masivo, no es para todos, porque hay un estándar alto de confiabilidad y seguridad que, ante el mínimo incumplimiento, hace imposible que una empresa pueda formar parte del sistema”.

La funcionaria agregó que “de un importador confiable pretendemos tener información anticipada de las compras que hace: quién es su proveedor, si es una empresa reconocida y con qué nivel de seguridad trabaja el producto que exportan hacia la Argentina”.

Para lograr esto, Misuraca destacó que “vamos a trabajar a fondo con la Cancillería y las distintas embajadas argentinas para que colaboren en el desarrollo de perfiles de riesgo de las empresas que provean a firmas locales”.

Tal como se explicó anteriormente, para la empresa argentina implicará una reducción de costos y tiempos por lograr un ingreso rápido de su mercadería, dado que no tendrá que “desaduanar” en el puerto o la Aduana del paso fronterizo, sino que lo podrá hacer en su propio depósito.

Courier confiable El servicio courier, o de transporte de cargas aeroexpreso, es el que brindan en la Argentina empresas como FedEx, DHL y TNT.

La principal ventaja que tienen estas compañías es que dan un servicio puerta a puerta. Es decir que una carga de importación y exportación puede estar en 24 o 48 horas en la planta de procesamiento o la góndola para su posterior comercialización.

Las empresas exportadoras argentinas suelen utilizar este servicio logístico para el envío de muestras o de productos de alto valor agregado. Como contrapartida, los importadores utilizan a los couriers para traer cargas sensibles, bienes de capital y partes y piezas críticas que no pueden esperar las demoras de un transporte marítimo.

La medida de facilitación que se anuncia desde la Aduana es vital para este sector, ya que implicará un aumento del tope de 1.000 dólares que el Gobierno fijó como valor máximo de exportación e importación permitido para operar con estas compañías.

Sucede que hoy, todos los envíos aeroexpresos que se ubican por sobre ese límite, necesitan contar con la intervención de un despachante de Aduana.

“Vamos a ampliar los límites de importación y exportación a aquellas empresas que demuestren que son confiables, estén en el programa y escaneen el 100% de las cargas de importación y exportación”, explicó Tirabassi.

“La Aduana comenzó a trabajar con los courier, primero ordenando toda la normativa, luego con el anticipo de información y, por último, con la automatización de todas las declaraciones. Todo esto nos permite hablar hoy de un programa de facilitación. Si a una de estas compañías la consideramos segura, va a tener mayores beneficios de despacho rápido ante la Aduana”, agregó la titular de la DGA.

Frente a estas iniciativas, la funcionaria destacó que “la Aduana es conocida básicamente por su rol de control, pero el rol de agregar valor y mejorar las condiciones para el comercio exterior en todos los puntos económicos del país es la meta que estamos llevando adelante y que no se puede concretar si no hay decisión política”. (INFOBAE PROFESIONAL)