La Cooperativa Sáenz Peña tomará un millón de pesos con riesgo cero para sembrar algodón
Los socios de la Cooperativa Sáenz Peña Limitada autorizaron al Consejo de Administración de la entidad la toma de un crédito de un millón de pesos, con la finalidad de sembrar unas mil hectáreas de algodón con un novedoso sistema denominado Riesgo Cero, en el que intervienen el Banco BICE, la aseguradora Sancor, con la asesoría de la UCEF, que es la Unidad de Coordinación y Evaluación de Financiamiento.
La novedosa metodología que sugiere la agrupación de los productores chaqueños para lograr las mil hectáreas exigidas para acceder al crédito fue aprobada por los cooperativistas en asamblea general extraordinaria, tras lo cual, el gerente de la entidad, Juan Miguel Kissiel, consideró que la entidad tendrá “una mejora considerable en el flujo de fondos para garantizar una mayor área de siembra de algodón para la campaña que se viene”, indicó. Para financiar la campaña que pronto se va a iniciar, la calificación positiva obtenida por la provincia habilita la posibilidad de contar con hasta 265 millones de pesos para bajar en créditos para siembra y cosecha de algodón, sumándose a la operatoria la aseguradora Sancor, que emitirá pólizas por el mismo monto habilitado para otorgar créditos. El dinero que será administrado por el Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) surge de un fondo de inversionistas creado para tal fin y que ya dispone de dinero para iniciar la financiación de la campaña. Cada póliza que se emita será de un millón trescientos mil pesos en concepto de financiamiento de siembra y cosecha de mil hectáreas grupales o individuales. El dinero será entregado a los solicitantes en una única etapa. “Daremos los créditos en distintas tandas porque no todas las zonas de la provincia siembran en la misma fecha, pero una vez hecho el contrato el desembolso para el grupo o el productor individual será en una única etapa”, detalló Carlos De los Santos.
Cómo y quiénes obtienen el crédito
Luego de la asamblea, el coordinador de la UCEF, Carlos de los Santos, explicó que son tres las categorías en las que se dividió a los posibles beneficiarios del crédito que se activa a partir de las mil hectáreas. Los productores que tengan menos de mil hectáreas tendrán la posibilidad de reunirse y sumar la superficie disponible para la siembra solicitando la financiación a través de las cooperativas, que en ese caso serían las tomadoras del crédito, entregando lo acordado en insumos, ya que la entidad sería la receptora y responsable del dinero prestado por el fondo. También existe la posibilidad para los agricultores con un número de hectáreas inferior al establecido como condición para el crédito de obtenerlo directamente con la presentación de la solicitud en forma grupal, reuniéndose varios productores para alcanzar las mil hectáreas, depositándose el dinero en sus cuentas. De tener el productor más de mil hectáreas automáticamente está habilitado para solicitar el financiamiento de la campaña de algodón. “Lo único que estamos esperando para habilitar el crédito es que califiquen ante la aseguradora los campos que se destinarán a la siembra de algodón. Obtenida la póliza ya estarían en condiciones de firmar los contratos y en la primera semana de octubre tener el dinero disponible con un financiamiento de mil trescientos pesos por hectárea”, explicó.
Los riesgos del productor
Los titulares de póliza, tal como se denomina al productor o la entidad cooperativa que accede al crédito, en caso de que no puedan cumplir con el compromiso asumido por problemas climáticos o biológicos tendrán saldada la cuenta a través del accionamiento del seguro. “El productor que no puede cubrir el préstamo por problemas de multirriesgo, paga la compañía de seguro y no recibe ningún juicio”, sintetizó De los Santos. “Si no devuelven el dinero y no hay fundamento de daño en los cultivos por acción climática, Sancor pagará el crédito, pero hará juicio al solicitante del préstamo. Si al dinero no se le dio el fin establecido queda claro que la aseguradora tiene el derecho de ejecutar”, aclaró. En relación con los tiempos para la devolución del crédito, explicaron que son inmediatos a la cosecha de la producción. “Siembra, cosecha, vende, tiene que pagar”, reza el concepto de esta herramienta crediticia.
(Diario Norte)