La Presidente será la primera oradora en la Cumbre de la Américas
No se lo quería perder. Desde hace dos días que buscaba reponerse de las anginas que la tenían en cama en Olivos para poder viajar hoy temprano y llegar justo a tiempo para abrir a las seis de la tarde de aquí (una hora más en la Argentina) la V Cumbre de las Américas.
Finalmente, luego de un retraso -originalmente iba a viajar ayer- la presidenta Cristina Kirchner partió esta mañana, a las 9:10, desde el sector militar del aeroparque metropolitano con destino a Trinidad y Tobago.
La argentina será la primera oradora en esta reunión continental de 34 jefes de estado, porque Mar del Plata albergó el último cónclave en 2005. Tendrá así su momento de mayor protagonismo en la ceremonia de apertura, en la que hablarán sólo tres presidentes más: el estadounidense Barack Obama -estrella indiscutida de esta cumbre-, el nicaragüense Daniel Ortega -por el SICA, Sistema de Integración Centroamericano- y el jamaiquino Bruce Holding, por el Caricom, la Comunidad del Caribe.
Esta pequeña capital caribeña, de gente alegre, palmeras en las calles y pocos edificios altos -entre ellos el Hotel Hyatt Regency que alberga la cumbre-, no será escenario de una bilateral de Cristina con Obama, que hace tiempo busca infructuosamente la Cancillería. Pero tampoco la habría con otros mandatarios. Obama pidió verse en conjunto con cada bloque subregional y gestionó a través de la chilena Michelle Bachelet, presidenta pro-témpore, un encuentro con los países de la Unasur.
Cristina estaría en esa cita mañana, en la que acaso afloren las diferencias ya conocidas por el impulso de varios países a la "cubanización" de esta Cumbre y el fuerte reclamo encabezado por Brasil de levantar el embargo de EE.UU. hacia Cuba (ver El Mundo).
Obama escribió a propósito de la Cumbre una columna para el Grupo de Diarios América, que en la Argentina fue publicada ayer por La Nación. "...el futuro ofrece enormes oportunidades si trabajamos juntos. Es por eso que líderes desde Santiago a Brasilia hasta Ciudad de México procuran renovar la sociedad de las Américas para que alcance logros en asuntos fundamentales...".
Es difícil creer que el párrafo, en el que Buenos Aires se cae del "mapa" de Obama, es fruto de una metáfora diplomática descuidada. La omisión no habría pasado inadvertida para el Gobierno, que ha hecho esfuerzos por acercarse a Obama y mejorar la relación con EE.UU., sin lograr aún un encuentro que sí tuvieron "líderes" como Lula y Felipe Calderón.
Así y todo, Cristina tendrá hoy sus diez minutos para exponer delante de todos. Se cree que reiterará sus posiciones recientes en foros internacionales: recordar la experiencia argentina en el manejo de las crisis y las recetas de fuerte intervención estatal para enfrentar sus efectos y mantener activa la economía. Algunas fuentes no descartaban que también pudiera introducir el tema de Cuba. (CLARÍN)