La satisfacción laboral, en baja

El Índice de Satisfacción Laboral (ISL) de agosto se ubicó en 61,38 puntos. Si se tiene en cuenta que la satisfacción laboral máxima estaría representada por un índice igual a 100, el índice está demostrando que la población encuestada se mantiene -en términos generales- en el área de satisfacción.

En julio, este indicador se había ubicado en 62,75 por ciento por lo que se advierte un descenso de 1.37 puntos porcentuales. De todas maneras, por cuarto mes consecutivo el ISL está por encima de sesenta puntos.

Dicho índice está compuesto por tres indicadores: Situación Personal, Macroeconómica, y Políticas Sociales y de Empleos.

Mientras que el indicador de Situación Personal se ubicó en un valor absoluto de 56,24 (2,2% menor al alcanzado durante el mes anterior) registrando una evolución positiva en comparación con el año precedente, el de Situación Macroeconómica mostró un ascenso del 1,8 % respecto del mes anterior.

En tanto, el sub-índice de Políticas Sociales y Empleos fue el índice más rezagado y el que arrastra el indicador general de satisfacción a un zona de indiferencia. El valor absoluto alcanzado para el mes es de 55,01, arrojando un fuerte descenso del 2,4 % respecto de mes anterior.

Los resultados del informe surgen a partir de una encuesta directa en la vía pública que se llevó a cabo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en la cuarta semana de agosto entre 300 personas en edad laboral.

Índice de Satisfacción Laboral

El Índice de Satisfacción Laboral (ISL) confeccionado por el Departamento de Investigaciones Sociales y Económicas (DISE) dependiente de FUNDECOS (Fundación Economía y Sociedad) aborda algunos aspectos que hacen a la problemática laboral.

Por ello, el indicador está confeccionado en base a aspectos de situación personal, situación macroeconómica prevista de corto y mediano plazo así como también la percepción respecto al accionar del Estado en cuanto a la generación de políticas de empleo y/o asistencia social para desempleados.