Los electrodomésticos nacionales incrementan su participación de mercado
El incremento de la venta de televisores en un año con Campeonato Mundial de por medio y cambios tecnológicos en la caja boba, es una realidad visible para todos. Si a este panorama se le suman las ofertas de las cadenas de retail y las tan comentadas 50 cuotas que ofrecen estos negocios en asociación con los bancos, la explosión de este segmento es claramente esperada y buscada.
Cada vez más se ven en las calles las cajas de cartón, para alegría de los cartoneros, que revelan que en las casas de muchos argentinos un nuevo producto comenzó a decorar el living o la habitación. Tanto los fabricantes como las cadenas de electrodomésticos destacan que el 2010 será el año en que finalmente los televisores de LCD desplazarán en ventas a los tradicionales TV de tubo. Según las cifras oficiales, la producción de LCDs muestra un fuerte incremento. En 2008 se produjeron cerca de 180.000 unidades, mientras que en 2009 la cifra llegó a los 406.800 artefactos fabricados en el país.
Más allá de este panorama alentador para este rubro específico, los fabricantes de productos para el hogar se muestran positivos con otros electrodomésticos que se subieron a esta fiebre de consumo: lavarropas, cocinas, heladeras, notebooks y celulares, entre otros, fueron también invitados a esta fiesta y se puede apreciar un aumento de la participación local de la producción en estos segmentos.
En una reunión con la ministra de Industria y Turismo, Débora Giorgi con las autoridades de las cámaras empresarias de fabricantes de electrodomésticos, realizada hace unas semanas, se destacó la participación de la producción nacional en el mercado local con un aumento de hasta el 30% en 2009. Para este años se prevé un crecimiento de la producción de sector que oscila entre el 10 y el 20%.
Los anuncios de inversión se multiplican y a los realizados el año pasado -como el acuerdo entre la empresa coreana LG Electronics con la local Codini por US$ 2,5 millones para la fabricación de dos modelos de lavarropas- se le suman el de la mexicana Mabe, que inyectará $67,8 millones en los próximos dos años, para ampliar la capacidad de producción de sus plantas de heladeras y de cocinas e instalar una nueva línea de producción de lavarropas. Esta realidad muestra un proceso de sustitución de importaciones en donde la fabricación local cobra cada vez una mayor importancia.
Cocinas en su punto
Desde la Cámara de Fabricantes de Artefactos de Gas (CAFAGAS), que representa a los fabricantes de artefactos domésticos de gas, afirman que en 2009 se vendieron 570.000 cocinas, igualando el año récord que fue 2007. Con estos números, la producción nacional recuperó el 30% del mercado.
"La Argentina es uno de los países con mayor experiencia y difusión del gas como energía en los hogares desde hace muchísimo tiempo, sólo comparable con lo que pasa en Holanda y el Reino Unido", destaca Hugo Ganim, presidente de CAFAGAS. Los productos que se fabrican localmente son aquellos que se utilizan para cocción -cocinas, hornos y anafes-, para el calentamiento de agua -calefones, termotanques y calderas murales- y para calefacción -convectores y calefactores con tiraje-.
"Aún con algunas épocas coyunturales, en que la importación a precios con un tipo de cambio extremadamente favorable, la participación local llegó a ser del 55% del mercado de cocinas. Siempre la industria nacional ha participado muy mayoritariamente en el mercado. Hoy, con las políticas activas en cuanto a control del comercio internacional desleal y un tipo de cambio todavía adecuado, sólo se registra una importación del 10% de aparatos de cocción y apenas perceptible de los otros rubros. En general el mercado de productos de gas está atendido en más de un 95% por la industria nacional. Con una producción total estimada de 1,5 millones de unidades año", afirma Ganim.
Con aproximadamente 20 fabricantes nacionales del rubro que ocupan un empleo directo de 6.000 personas, el crecimiento de la mano de obra es proporcional al aumento de la producción esperada. "Este es un sector industrial especial, donde las inversiones se hicieron muy fuertes desde que se recuperó la actividad, a partir de 2003. Otra particularidad que compartimos con el segmento de los lavarropas es que pocas empresas multinacionales quedaron con inversiones en el país después del susto de fines de 2001 y como a partir de allí el crédito se mantiene escaso y caro para el tamaño intermedio de nuestras empresas, las inversiones se fueron haciendo con capital propio", comenta Ganim. La buena noticia es que con este incremento de volumen se espera la llegada de nuevas inversiones de empresas internacionales con disponibilidad crediticia, que Ganim se reserva de revelar, por el momento.
El panorama del sector para este año se muestra en sintonía con el resto del mercado, tras un 2009 que empezó flojo y tomó vuelo en el segundo semestre del año. "Con las medidas económicas activadoras del consumo se espera una continuación de esta mejora cuya expectativa es de un 10% en relación con el año anterior. Esto afecta a todos los productos y mucho más a las cocinas, rubro en el cual se reemplazó fuertemente a la importación. Claro que la condición para que esto ocurra es que se mantenga el poder adquisitivo del consumidor, un tipo de cambio adecuado y políticas activas de control del comercio internacional desleal", se ataja Ganim.
Los trapitos se lavan en casa
Cuando en 2009 la empresa coreana LG Electronics realizó una alianza estratégica con la cordobesa Codini para la fabricación de dos modelos de lavarropas marca LG, tenían motivos claros para esta apuesta. Diego Pacheco, Supply Chain director de LG Electronics Argentina, afirma que "hay un lineamiento y una promoción muy importante del actual gobierno para la fabricación local y como empresa nos alineamos a esa política de promoción que hace a los productos locales muy competitivos y atractivos".
La inversión realizada por la compañía permitió incorporar 45 empleados que se sumaron al staff de 120 que ya trabajaban en Codini. El acuerdo, que se cerró a mediados de 2009 y prevé la fabricación de un modelo de carga superior de 9 Kg. y otro de carga frontal de 8 kg., es una complementación, en donde Codini aporta las capacidades industriales y la maquinaria de base que tenían disponibles, además de una inversión adicional para alguna parte de la línea de ensamble.
"La fabricación se inició a fines de 2009, las primeras producciones las tuvimos en diciembre y la comercialización real de esos productos va a ser durante este año. Apuntamos a fabricar un promedio del 4.000/5.000 unidades por mes, de ambos modelos, aproximadamente 60.000 unidades al año", destaca Pacheco.
Los datos oficiales revelan que en 2009, la fabricación de lavarropas alcanzó las 560.846 unidades, superando las 524.437 producidas en el 2007, que era el récord histórico. La aplicación de licencias no automáticas permitió hacer crecer la cantidad de lavarropas nacionales vendidos del 62% del total en 2007 al 80 % en 2009.
Según los datos de la Cámara Argentina de Fabricantes de Electrodomésticos (CAFED), en 2009 el mercado nacional fue de más de 700.000 unidades, de las cuales la industria argentina abasteció en más de un 70%. "Cabe destacar que la producción nacional no sólo aumentó su participación sino que lo ha hecho en un mercado de fuerte crecimiento de volumen. Ello fue posible por fuertes inversiones que se hicieron en el país y hoy está en condiciones de abastecer el 100% del mercado interno y mantener exportaciones a otros países como por ejemplo, Uruguay y Paraguay, como se vienen realizando hace varios años. La industria argentina está sumamente integrada y posibilita que la mayor parte de los insumos sean producidos en nuestro país", destaca Luis Fernández presidente de la cámara que representa a los fabricantes de lavarropas, secarropas y todos los pequeños electrodomésticos como procesadoras, licuadoras, batidoras, planchadores y secadores de cabello, ventiladores y estufas eléctricas, entre otros
Ante este panorama, que permitió un crecimiento de aproximadamente en un 80% en la mano de obra directa ocupada, se estima que continuará en el año 2010. "Con relación al resto de los productos perjudicados por la importación a precios de dumping de terceros países, confiamos en tener niveles de recuperación. En algunos productos ya se ha iniciado", concluye Fernández.
Las heladeras no se enfrían
La incorporación de la producción de lavarropas de LG Electronics se suma a otros artefactos como aires acondicionados, microondas, televisores LCD y celulares, que hace más de un mes, fabricarán con empresa internacional Brightstar, radicada en Tierra del Fuego. "Estamos revisando la posibilidad de fabricar monitores y de refrigeradores", comenta Pacheco.
Este sector recibió inversiones en los últimos años de más de US$ 40 millones entre todos los jugadores del mercado. Empresas como Mabe, Gafa y la local Briket, inyectaron capital para que la producción se incrementara y llegara en 2009 a las 497.434 unidades, el 69,6% del total del mercado, y logró una sustitución de importaciones y puso en la cancha a viejos jugadores como Philco, que nuevamente comenzó a fabricar heladeras.
Roberto Lenzi, presidente de la Cámara Argentinas de Industrias de Refrigeración y Aire Acondicionado (CAIRAA) y presidente de Briket, afirma que un segmento con grande posibilidades de crecimiento es el de exhibidoras de vidrio, que en algunos casos se usan para enfriar bebidas. "Antes se traían mucho de Brasil y China y en la actualidad estamos fabricando casi todo localmente. Acá vemos una sustitución total de importaciones, si bien aún ingresa algo desde China", comenta. Con un mercado de aproximadamente 200.000 productos al año, fabricantes locales como Frare y Inelro ven un nicho interesante ya que cuentan con la capacidad de producción y son fáciles de fabricar.
Los fabricantes locales, formado por las empresas Bambi, Koinoor Columbia, Philco, Briket, Frare y Inelro, emplean aproximadamente entre 2.500-3.000 personas. A esta cifra se suman otros 3.000 de las subsidiarias de los dos fabricantes Mabe, que controla el 34% del mercado de heladeras, y Gafa. "En los últimos 3 tres años incrementamos en un 15 al 20% anual el personal y a medida que se sustituyeron las importaciones, se contrató más gente", confirma Lenzi. Asimismo, un 10% de la producción nacional se está exportando a los países límites, con la excepción de Brasil, que se muestra reacio a la importación de productos.
Y si en materia de frió se trata, Gustavo Biassoni, gerente de marketing de consumer electronics de la empresa Samsung, fuertemente ligada a la producción de televisores LCD, asegura que "estamos en planes de expandir nuestras categorías de fabricación y que no se limite sólo a la línea de electrónica sino también a la de electrodoméstico. Por ejemplo, aires acondicionados".
Locales y extranjeros
Carmelo Ferrante, director de Marketing de la cadena de compras Garbarino, afirma que comercializan la mayor parte de los productos argentinos disponibles con fabricación local y si tiene que destacar alguna diferencia entre con los importados enumera que, en algunos casos, los precios son levemente menores y en otros, en el caso de los importados, en que sus tecnologías son levemente más complejas o avanzadas. "En general no hay sustanciales diferencias", concluye.
A la hora de elegir una marca, las más buscadas son las internacionales, ya sean de producción local o extranjera y para este año esperan que los televisores LCD y LED, las notebooks y los celulares sigan siendo los líderes de las categorías de electrodomésticos y electrónica.
Para Pacheco, de LG Electronics, las diferencias que existen entre los productos nacionales y los importados son nulas en lo que respecta, por lo menos, en el caso de compañías globales. "Estamos fabricando con la misma calidad y se cumplen los mismos estándares que en cualquier otra parte del mundo. También se ha acelerado los lanzamientos y actualmente los productos que se presentan afuera se los hace también localmente en el poco tiempo", afirma.
Según los datos de la Secretaría de industria, a cargo de Eduardo Bianchi, "las empresas nacionales del sector en conjunto, están en capacidad de abastecer el mercado nacional de electrodomésticos pequeños (procesadoras de mesa y manuales, batidoras, licuadoras, estufas, ventiladores, entre otras). El caso de la empresa Liliana, que está en condiciones de producir 1,5 millones de estufas; 500.000 procesadoras de mesa y 200.000 manuales; 100.000 batidoras; 300.000 licuadoras y 600.000 ventiladores de techo", destacan.
Asimismo, durante el 2009 se exportaron numerosos electrodomésticos, entre los que se destacan los aparatos electrotérmicos para el cuidado del cabello, los lavarropas automáticos familiares, los congeladores y diversos tipos de estufas y parrillas a gas. "Estos cuatro artículos concentraron alrededor del 75% de las exportaciones del sector en el año 2009", afirman desde la secretaría de industria.
El Mercosur concentra casi la mitad de las ventas argentinas de electrodomésticos al exterior y Chile representa más del 15% de las ventas externas sectoriales. Por fuera de la región, cabe destacar el caso de Italia, país al que se exportaron principalmente aparatos para el cuidado del cabello y que en 2009 tuvo el 13% de las exportaciones nacionales del sector.