MANAGEMENT

Los mandos medios se sienten frustrados: ¿por qué?

Los mandos medios, tantas veces desprestigiados, son piezas vitales de las corporaciones. Por el lugar que ocupan en la pirámide, son quienes mejor saben cómo funciona realmente la compañía: por dónde circula la información, quiénes son los empleados más valiosos y cómo conseguir recursos para nuevos proyectos.

De esta forma, actúan como tendones fundamentales para unir la alta estrategia con la táctica cotidiana.

Sin embargo, algo parece no estar funcionando bien. Según una encuesta de Accenture realizada entre mandos medios de más de mil compañías de diferentes países, el 61 por ciento se manifestó "insatisfecho" o "ligeramente satisfecho" con su trabajo.

Un 44 por ciento contestó que su salario era demasiado bajo en relación con sus responsabilidades. El 43 por ciento confesó recibir escaso reconocimiento por sus aportes a la empresa. Así, más de un 40 por ciento de los encuestados manifestó que no dudaría en cambiarse de empleo si se presentara la ocasión.

Ahora bien, si usted es un alto ejecutivo tenga muy en cuenta estos resultados. Es probable que, en su empresa, aquellos que se ocupan de difundir y ejecutar la estrategia en los niveles inferiores de la organización se sientan frustrados.

Y de la frustración a la pérdida de talento hay un paso muy pequeño. Pero, incluso aunque los mandos medios no deserten, usted tendrá colaboradores desmotivados que transmitirán su insatisfacción a sus subordinados.

Ahora bien, ¿cómo remediar la situación?

En primer lugar, averigüe qué tan extendido se encuentra el descontento en su propia empresa a través de una encuesta interna de satisfacción laboral. Si los resultados confirman la investigación de Accenture, piense en tomar las siguientes medidas:

* Comunicación y participación

El top management debe comunicar hacia abajo que comprende la importancia fundamental de los middle-managers en la implementación de la estrategia. Incluso, es buena idea involucrar a los mandos medios en el proceso de planeamiento.

* Escuche y ejecute

Los altos ejecutivos deberían hacerse unos minutos en sus atareadas agendas para escuchar a sus colaboradores. Así, seguramente oirán quejas del estilo: "estoy hace diez años en la empresa pero gano muy poco" y "trabajo tanto que mis hijos ya no recuerdan mi cara".

Las palmadas de consuelo están muy bien. Pero no hay nada más efectivo que la acción para que el mando medio se sienta comprendido. Es decir, una vez recolectadas las quejas, es necesario implementar medidas para solucionarlas. De hecho, muchas de estas medidas son increíblemente sencillas y pueden implementarse con un costo cercano a cero.

* Reestructuración de compensaciones

Según los investigadores de Accenture, las compensaciones merecen un capítulo a parte porque aquí se encuentran las raíces de la insatisfacción de los mandos medios. En efecto, para reducir el descontento, es necesario implementar sistemas de retribución que vinculen más estrechamente el salario con el rendimiento.

En definitiva, los mandos medios son piezas fundamentales de cualquier gran organización porque actúan como los tendones que unen el hueso duro del top management con los músculos de los empleados de la base de la pirámide. Téngalos muy en cuenta. No olvide que cuando los tendones se desgarran, la empresa no se mueve. (IECO)