Los pooles de soja van a facturar cerca de 75% más este año
La cosecha récord de este año le aportó riqueza al campo en general y a los grandes productores en particular, que pudieron sortear mejor la crisis de los dos años anteriores.
Como consecuencia, por mayor cosecha y mejores precios, el sector tendrá una facturación 75% mayor a la de la campaña 2009.
Si bien parte del sector agropecuario utiliza la bonanza actual para pagar las deudas de los dos últimos años, signados por el conflicto con el Gobierno y la sequía, otro grupo suma estos beneficios a las ganancias que ya venían acumulando. Además, mientras se debate el futuro de las retenciones, la cosecha actual permite nutrir las arcas nacionales con un suculento 35% por cada tonelada de grano exportado y 32% por cada tonelada de aceite enviada al exterior.
Las caras más visibles entre los grandes empresarios sojeros son, actualmente, el diputado nacional Alfredo Olmedo, uno de los mayores productores de soja del país, y Gustavo Grobocopatel, cuya empresa acaba de anunciar una inversión de u$s 8 millones para levantar una fábrica de pastas secas en Chivilcoy, Buenos Aires. Pero hay, en total 7.500 explotaciones que producen el 62,8% de la soja, contra otras 53.000 que se distribuyen el 37,2 % restante.
Los datos surgen de estudios del mercado sobre la base de información recabada por la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca). Y según Luis Contigiani, de la Federación Agraria Argentina (FAA), ese porcentaje de distribución de la cosecha es también aplicable a la producción del año 2009.
A igual repartición, entre uno y otro año, los grandes productores pasaron de cosechar 20 millones de toneladas –de las 32 millones recolectadas el año pasado– a alzarse con 34,5 millones de toneladas de las 55 millones actuales. En paralelo, al aumento del 70% en la recolección de soja se suma los mejores precios.
Los valores de la soja pagados hasta julio estaban por debajo de los promedios del año pasado porque la magra cosecha promovió en 2009 la puja entre los exportadores con compromisos tomados.
Pero la suba se aceleró y, ayer, en Rosario, la soja cotizaba $ 1.040 por tonelada, contra los $ 1.010 del mismo día del año pasado. Y como los productores empezaron a acelerar las ventas a partir de los $ 1.000 por tonelada que la oleaginosa alcanzó hacia fines de julio, si se proyectan las ventas la facturación global aumentará por encima del incremento de cosecha.
Ayer, el ministro de Agricultura de la Nación, Julián Domínguez, asistió a un seminario sobre Biotecnología organizado por la FAA, en la Capital Federal, donde insistió con la necesidad de reformar la Ley de Arrendamientos. En el mismo marco, agregó la necesidad de limitar la venta de tierras argentinas a extranjeros.
El proyecto presentado al respecto los agrodiputados nacionales Ulises Forte (UCR-La Pampa) y Pablo Orsolini (ACyS-Chaco) busca justamente limitar las posibilidades de los grandes grupos y los inversores financieros externos al sector de alquilar y explotar campos.
(El Cronista)