Martín Redrado se reúne con el títular del FMI

El director del departamento de América del FMI, Nicolás Eyzaguirre, dijo que Argentina tiene la “obligación” de permitir al organismo revisar su economía y alertó que el país tendrá un crecimiento bajo por su falta de acceso a los mercados financieros. Agregó que no debe tener “vergüenza” de aceptar una misión anual. El tema será analizado en las reuniones que mantendrán, en forma separada, hoy el titular del Banco Central, Martín Redrado, y mañana el ministro de Economía, Amado Boudou, con el director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn. Ambos funcionarios se encuentran en Estambul, Turquía, participando de la Asamblea Anual del FMI y el Banco Mundial.

Redrado hará referencia a la propuesta que recibió en las últimas horas de bancos internacionales para colocar deuda a través de la emisión de un bono por un monto de entre 500 y 1.000 millones de dólares, a diez años, con una tasa de 13,5 por ciento. En el Gobierno la recibieron con agrado pero apuntan ahora a una tasa menor. “No tenemos ninguna urgencia, pero esto demuestra que el acceso lo tenemos ahora, aunque a costos que no son del todo atractivos”, explicaron las fuentes. “La tasa ofrecida es algo elevada, por lo que no debe descartarse una colocación a una tasa mas baja”.

Por su lado, Boudou insistirá ante Strauss-Kahn que una eventual misión del FMI que venga al país a supervisar las cuentas públicas se concentre “en cuestiones técnicas, que sea un intercambio de información, que no haya planteos de política económica”.

El ministro recordó que en los años 70, 80 y 90 “el Fondo llegaba a la Argentina como un virrey, con todos los honores, y era recibido con la alfombra roja y los oídos bien abiertos para escuchar lo que había que hacer”, y afirmó que “eso, este gobierno no lo va a hacer”.

Sobre esta cuestión, Eyzaguirre consideró que el país tiene “el deber” de compartir esa información con el resto de los Estados miembros de la institución y del G-20, y negó que esta supervisión sea “una auditoría” de la economía argentina.

En conferencia de prensa, aseveró que “acercarse al Fondo no es para nada una vergüenza”.

“La Argentina es un miembro del FMI y del G-20. Ambos son clubes en los que uno participa y comparte sus políticas con los demás. Pero participar en un club para escuchar lo que dicen los demás sin decirles lo que uno está haciendo, resulta bastante raro”, planteó.

El secretario del Tesoro norteamericano, Timothy Geithner, en la reunión del Comité Monetario y Financiero Internacional del FMI (IMFC) planteó “que todos los países permitan la publicación de las revisiones anuales del artículo IV”, aunque no mencionó el caso específico de la Argentina.

Ese Comité dio ayer su primer paso para otorgar un mayor peso a las economías emergentes en la institución, al apoyar la propuesta del G-20 de aumentar al menos 5% las cuotas de las naciones en desarrollo. Boudou se había sumado a los pedidos de algunos países como Brasil, que impulsan que el aumento de sea siete por ciento.

Redrado, por su parte, expuso ante inversores sobre la situación monetaria del país en dos seminarios, uno organizado por el banco de inversión JP Morgan, y otro por Merrill Lynch. El funcionario, una vez más, afirmó que la política monetaria llevada adelante por el BCRA de acumulación de reservas y tipo de cambio con flotación administrada permitió amortiguar el impacto de la crisis.(CRÍTICA DIGITAL)